El «banco malo» intenta capear su crisis con un nuevo consejero delegado

Se trata de Jaime Echegoyen, que asumirá las funciones del hasta hace poco director general de la entidad, Walter de Luna, quien abandonó su puesto por discrepancias con la presidenta, Belén Romana. Echegoyen, licenciado en Derecho por la Universidad Complutense, ha desarrollado toda su carrera profesional en el sector financiero, donde ha sido consejero delegado de Bankinter y máximo responsable de Barclays España.

Los conflictos de intereses entre la Sareb y los propios bancos que participan en su accionariado son otro de los problemas estructurales de esta institución.

Estos cambios en la cúpula de la Sareb se producen tras un año 2013 de máxima intensidad en la gestión del «banco malo», ya que recibió 50.000 millones de euros de activos inmobiliarios tóxicos procedentes de la banca nacionalizada y de las entidades capitalizadas con ayudas del fondo de rescate europeo. El año pasado, según datos de la propia Sareb, la entidad obtuvo ingresos superiores a los 3.800 millones de euros y amortizó 2.000 millones de deuda.

Sin embargo, y pese a estas cifras, la intención de Belén Romana es «avanzar hacia una gestión comercial de sus activos más integrada, crear valor en la cartera de activos traspasados, al tiempo que realizar una gestión más activa de riesgo de crédito», según aseguró ayer en una nota.

En este contexto se enmarcan también los nombramientos de Juan Barba como director comercial, hasta ahora director de activos inmobiliarios, así como de Enrique Saiz como nuevo director general de reestructuraciones y recuperaciones procedente de Banesto, donde ocupaba el mismo puesto.

Finalmente se ha creado la dirección de recursos corporativos que integra las direcciones de medios y de operaciones bajo el mando de Alfredo Guitart.

La Comisión Europea y el Banco Central Europeo aseguraban en su ultimo informe sobre España, publicado el mes pasado, que las ventas de activos inmobiliarios por parte de la Sareb han sido hasta ahora inferiores a lo previsto, pero los ingresos derivados de los préstamos a promotor han superado las previsiones.

Desde el Gobierno, sin embargo, se intenta poner las cosas en contexto temporal. El ministro de Economía, Luis de Guindos , aseguró recientemente en el Congreso de los Diputados que «el banco malo es un instrumento para ganar tiempo y, de hecho, tiene 15 años para vender todos los activos que le han sido traspasados». El ministro añadió también que la Sareb ha ayudado a modificar la percepción del sistema financiero español y del conjunto de la economía española.