El ICO constata también que el crédito ya empieza a fluir a las pymes

La financiación a las empresas del país con recursos del banco público comenzó 2013 siendo muy débil. En enero este solo concedió 104 millones de euros en préstamos de nueva producción. Sin embargo, en el último mes de ese año, diciembre, el monto total puesto a disposición de la actividad económica por el ICO se disparó hasta los 2.696 millones. La mitad de las operaciones se cerraron además con micropymes (entre 1 y 9 empleados) y por importes inferiores a 25.000 euros, lo que para la entidad es una evidencia de que sus recursos están llegando a la base de la economía real.

Los primeros datos de 2014 de los que dispone el ICO, que recibe cada quincena de los bancos privados, a través de los cuales comercializa sus préstamos, llevan a la dirección de la entidad a confirmar que "ese tono positivo" se mantiene en el arranque de este año. Así, el organismo dependiente del Ministerio de Economía prevé movilizar durante el conjunto del ejercicio unos 16.000 millones de euros. "Es una estimación verosímil, en línea con la evolución económica y sería un gran éxito poder alcanzarla", ha señalado el presidente del ICO, Román Escolano, durante la presentación del balance de la entidad, que terminó 2013 con un beneficio neto de 71 millones, un 19% más.

Escolano, pese a mostrar todas las cautelas, ha exlicado que tanto las primeras cifras de concesión de préstamos como el aumento de la demanda en las oficinas bancarias dan fe de esa "sensación" de recuperación del crédito. De hecho, algunos bancos privados, entre ellos el Santander, BBVA y el Sabadell, han anunciado que este año incrementarán notablemente el flujo de crédito nuevo.

Esto podría llevar a las esas entidades a favorecer la concesión de sus propias líneas de crédito frente a las del ICO, que se comercializan en sus oficinas. "Somos conscientes de esa situación", ha dicho Escolano, quien en todo caso ha matizado que esa competencia es buena y que vender las líneas ICO también es "bueno" para los bancos privados, por la comisión, diferente en función del vencimiento del crédito, que les paga el banco público. Al respecto, el presidente del Instituto ha asegurado que esa rentabilidad ofrecida a las entidades financieras no se ha incrementado.

El ICO ultima además la puesta en funcionamiento del Fondo Global ICO, un fondo de fondos de capital riesgo dotado con 1.200 millones de euros y que con la captación de inversores extranjeros podría aumentar sus recursos hasta los 3.000 millones, que se pondrán a disposición de nuevos proyectos empresariales como alternativa a la financiación bancaria.

Captar más recursos de inversores foráneos, aprovechando la renovada confianza en España, es otra de las metas que se ha fijado la cúpula del Instituto para este año, con el fin de reequilibrar su base inversora. Durante los años de la crisis, y ante la fuga del capital extranjero, el dinero español alcanzó un peso sobre los recursos totales que ahora es del 53%. Escolano ha informado de que es objetivo es incrementar el peso internacional, sobre todo con inversores de Asia, Oriente Medio e Iberoamérica, pero sin concretar el porcentaje que podrían alcanzar.