Panamá tiene ya un «plan B» por si Sacyr abandona las obras del Canal

Quijano, según la agencia DPA, ha solicitado ya una reunión con representantes de la aseguradora Zurich América, con la que el consorcio firmó un seguro de finalización de la obra de 600 millones de dólares, unos 440 millones de euros. Además, GUPC presentó un aval por 300 millones de euros, de los cuales el 48% corresponden a Sacyr y asume la aseguradora pública española Cesce, y que el administrador está dispuesto a reclamar si las obras no siguen adelante, como avisó ayer en una entrevista publicada por ABC .

La Autoridad del Canal quiere ahora evaluar con la compañía de seguros los pasos a dar en el caso de que Sacyr y sus socios —la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana—, que no están dispuestos a asumir el sobrecoste de 1.170 millones de euros detectado, finalmente abandonen la ampliación del Canal.

De llegar a ese punto, Zurich se responsabilizaría de terminar el proyecto. La aseguradora puede decidir entonces buscar a otro contratista o ceder la obra a la propia Autoridad y que sea esta la que readjudique el proyecto. El propio Quijano aclaró, según DPA, que frente a un evento extremo, la Autoridad del Canal tiene la facultad de asumir el proyecto de expansión y contratar a una compañía administradora del tercer juego de esclusas, para garantizar el tránsito de los grandes buques «post Panamax».

El coordinador del GUPC, el italiano Paolo Moder, informó ayer de que los 1.170 millones de euros de sobrecostes que reclama se justifican porque la Autoridad administradora no dio la información geológica correcta . Moder aseguró que de no haber acuerdo el próximo 20 de enero se paraliza la obra. En su primera rueda de prensa desde que GUPC advirtió de la suspensión, Moder dijo que si se rompe el contrato, el consorcio acudirá «a todas las instancias judiciales para hacer valer sus derechos, a todos los lugares y países que tenga que ir».

Como fuere, la ministra española de Fomento, Ana Pastor, ha viajado este domingo al país caribeño para reunirse con su presidente , Ricardo Martinelli, la Autoridad del Canal y representantes del consorcio de empresas con el fin de llegar a un acuerdo que evite la paralización de las obras de ampliación del canal en 21 días, tal y como anunció Sacyr, que reclama a la ACP el sobrecoste en el que ha incurrido GUPC.

Sin embargo, Quijano insiste en que la Autoridad no cederá a lo que califica de «chantaje». El administrador recuerda además que Panamá ya ha pagado a GUPC buena parte de los 3.118 millones de dólares por los que encargó la obra al consorcio liderado por la multinacional española. En concreto, y según Quijano, la ACP ha desembolsado hasta la fecha 2.831 millones de dólares, 2.047 millones corresponden al pago por los avance en el proyecto y otros 784 millones en adelantos.

Sacyr y sus socios se adjudicaron en 2009 la ampliación del Canal de Panamá, con la que se prevé duplicar su capacidad, presentando la oferta más barata, 3.118 millones de dólares, por debajo incluso de la base de licitación (3.481 millones), lo que provocó dudas entre las otras compañías internacionales que pujaban por el contrato.

Las obras, que llevan un avance del 65%, deberían estar finalizadas en junio de 2015, nueve meses después de lo estipulado en el contrato de adjudicación. Un portavoz de la administración del Canal acusó ayer al consorcio de haber «reducido» el ritmo de trabajo desde el pasado día 30 de diciembre, cuando las empresas lanzaron su ultimátum, informa EFE. Panamá insiste en que la ampliación de la vía se concluirá con o sin retraso. Y, por lo visto, con o sin el consorcio.