Ryanair ataca a Vueling desde Bruselas

Aunque O’Leary ha prometido que mantendrá su actual base en el aeropuerto de Charleroi, a 50 kilómetros al sur de la capital, el mero anuncio de que extiende sus operaciones a las instalaciones en Bruselas ha encendido un vivo debate entre los políticos de la región belga de Valonia, que han reclamado su presencia en el parlamento regional para explicar sus planes al tiempo que acusan a las autoridades aeroportuarias de Bruselas de hacerles la competencia desde un aeropuerto «demasiado flamenco».

España, Italia y Portugal son los nuevos destinos elegidos por la «low cost» y, específicamente Barcelona , que tendrá una frecuencia de tres vuelos diarios, siete días por semana. Alicante, Ibiza, Malaga, Palma de Mallorca y Valencia son otros destinos españoles con al menos un vuelo diario. En Portugal abrirá líneas con Lisboa y Oporto mientras que en el caso de Italia volará a Roma y Venecia. Dentro de su peculiar estrategia, Ryanair ha anunciado que los primeros billetes saldrán a la venta hoy mismo en su página web, es decir, antes incluso de que hubieran anunciado formalmente al aeropuerto de Bruselas su intención de operar en sus instalaciones.

La noticia va a alterar los planes de la española Vueling , que había logrado un nicho muy eficiente en la línea Bruselas Barcelona y Bruselas Valencia, compitiendo solo con la belga Brussels Airlines (del grupo Lufthansa) y con su principal adversario en materia de precios en un aeropuerto incómodo de utilizar como el de Charleroi. La llegada de Ryanair a un aeropuerto de primer nivel como el de Bruselas no va a cambiar su política de precios, según O’Leary.