Portugal logra reducir el déficit, pero aún queda lejos de su objetivo

El déficit público portugués acumulado en el tercer trimestre del año ha sido del 5,6% del PIB, equivalente a casi 7.000 millones de euros. El Ejecutivo luso pretende cumplir lo acordado en su rescate financiero y llegar a finales de 2012 con un déficit del 5% del PIB (inicialmente previsto en el 4,5%). Para ello va a contribuir, entre otras medidas, la reciente privatización de los Aeropuertos de Portugal (ANA), vendido al grupo francés Vinci por 3.080 millones de euros.

De acuerdo con los datos divulgados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el déficit público registrado durante el tercer trimestre del año ha sido del 3,2% del PIB, un valor más favorable que los 6,8% registrados en los primeros seis meses de este año. De esta forma el saldo presupuestario de los nueve meses se ha reducido considerablemente y se acerca al objetivo del 5% para finales de año y sobre todo se ha reducido de cara al mismo periodo del año anterior, en el que se registró un déficit del 6,7% del PIB.

«La evolución de este ingreso fue esencialmente afectada por la reducción significativa de los impuestos y de las contribuciones sociales», explicaba ayer el INE en un comunicado. Los impuestos sobre el rendimiento y el patrimonio cayeron 5,6%, los impuestos sobre la producción y la importación 4,9% y las contribuciones sociales 6,8%. En compensación se ha verificado una reducción del gasto corriente , destacando la caída de 13,3% en lo relativo al gasto con el personal. «Esta reducción se refleja sobre todo a la supresión del subsidio de vacaciones a finales del primer semestre de 2012, y en menor medida a la variación del empleo», matiza el INE.

Por otra parte, el Gobierno de Pedro Passos Coelho pretende acumular en los últimos tres meses del año unos ingresos extraordinarios del valor de 1200 millones de euros que le permitan reducir el valor del déficit. No obstante, debido a la caída del consumo, en este último periodo del año se está registrando una consecuente caída en los ingresos fiscales.

Por la primera vez desde 1999 Portugal ha conseguido durante un trimestre no registrar necesidades líquidas de financiación cara al exterior. Los datos del INE confirman un excedente trimestral de 1472 millones de euros (3,5% del PIB) cuya evolución «refleja esencialmente el comportamiento del saldo externo de bienes y servicios, con las importaciones que han disminuido 1,5% y las exportaciones que han aumentado 0.9%». Un valor positivo que se puede explicar por «oscilaciones irregulares» en los datos referentes a tres meses.

La disminución de la necesidad líquida de financiación refleja la caída en la búsqueda interna durante los últimos dos años. Las familias han reducido el consumo y a su vez las empresas han dejado de invertir por lo que en ambos casos no han recurrido al crédito. En lo que se refiere a las exportaciones, que contribuyen positivamente para la mejora del saldo de la economía lusa de cada al exterior, están todavía limitadas por la complicada coyuntura internacional.