La náutica se ahoga

Me considero un fan número uno del Real Club de Palma porque ya estuve visitándolo e incluso regateando allí antes de los años 80, que naciera y comenzara a crecer la Copa del Rey.

Ahora toca renovar la concesión y nos encontramos con que hay muchos problemas para hacerlo. De acuerdo que se han podido dormir en los laureles la anterior Junta Directiva, que presidía Javier Sanz, pero la Autoridad Portuaria y el Gobierno Balear deberían de tener un respeto máximo a esta institución que año tras año les llena las arcas.

Nada menos que el Consejo de Estado está metido en el embrollo para intentar salvar los muebles a esta nueva Junta Directiva, que preside Emerico Fuster, y que se está viendo muy perjudicada por la nefasta gestión de Javier Sanz antes de salir de la presidencia de club, de la desidia de la presidenta de Baleares Francesca Lluc Armengol Socías, que está en otro partido mientras algunas empresas privadas se quieren hacer con la concesión del Náutico de Palma.

La presidenta Armengol tiene mucha información sobre los chiringuitos de la noche mallorquina, pero no se preocupa de investigar la presunta prostitución de las niñas menores de edad, ni se preocupa del deporte, ni de la vela y el piragüismo infantil y juvenil que se practica en el Real Club Náutico de Palma y que tantos triunfos le han reportado a España.

Como dice el socialista Alfonso Guerra, un país como España que tenemos que mendigar un mínimo porcentaje de nuestro idioma y nos quedamos callados, está muerto. Qué esperamos con políticos de la talla de Colau, Armengol, Kichi, el presidente de Asturias, que ahora está pidiendo subvenciones para impartir el bable...

Señores, la náutica aporta mucha riqueza a España y más la que practican los grandes clubes como el Real Club Náutico de Palma, el Real Club Náutico de Valencia o misma mente el Abra de Bilbao o el Monte Real Club de Yates.

Las concesiones a los clubes hay que renovarlas ya porque son un bien común y son de interés general. Agrupan a la juventud, que mientras está practicando su deporte favorito no está quemando contenedores por las calles protestando por toda la injusticia social que se está generando en este país.