Mutua Madrid Open
Stefanos Tsitsipas: «No veo que Nadal y Djokovic vayan a desaparecer pronto»
El griego analiza el hoy del tenis, con nuevas personalidades y campeones que ofrecen refresco y opciones
Nadal: «Sé que habrá cosas que no saldrán bien, si puede llegar una victoria, fantástico»
Stefanos Tsitsipas, durante la entrevista con ABC
Aparece Stefanos Tsitsipas (Atenas, 1998) con su melena rubia escondida bajo una gorra de la selección española de fútbol. Alejandro Davidovich, a quien saluda antes de sentarse a charlar con ABC, le pregunta. «¿Y eso?», señalando la gorra. Tsitsipas sonríe, «¿Y por qué ... no? Y no es un regalo, he ido expresamente a comprarla», y se la quita para observarla mejor. «Me la he comprado», repite. El griego, ocho títulos, maestro de maestros en 2019, llega a Madrid como uno de los más firmes candidatos en la tierra batida, con la espina de perder en cuartos en el Conde de Godó hace dos semanas, pero con el título del Masters 1.000 de Montecarlo, que ya ganó en 2021.
-¿Cómo está?
-Muy bien. Madrid es una gran ciudad. Creo que tiene la mejor experiencia culinaria del mundo. Después de mi cocina quizá.
-¿Es la tierra batida la superficie en la que más se divierte?
-Disfruto mucho jugando en tierra. Es una gran superficie. Es muy creativa. Puedes encontrarte pasando de defender a atacar, muchas cosas pueden pasar. Y de forma inesperada. Pero también si juegas en dura, mi juego también se ajusta a la perfección. Es de las más fáciles para adaptarte cuando hay que cambiar. Es más natural, pero en mi mejor día, difícil decirte cuál es la mejor.
-¿La de Madrid es más difícil?
-Casi no parece de tierra. Los golpes son diferentes y cuesta mucho más abrir pista. Tienes que pelearte con una pelota más alta y más rápida. La pelota tiene que ser profunda y con un extra de precisión. En Madrid he conseguido buenos resultados, he ganado más experiencia y tengo más partidos acumulados. Tengo más herramientas que la primera vez que vine aquí. Ya es cuestión mía si soy capaz de utilizar todo eso de la mejor forma posible.
-Nadal y Djokovic han sido tajantes en criticar la decisión de Wimbledon de prohibir jugar a los tenistas rusos y bielorrusos. ¿Qué opina usted?
-Los tenistas afectados no tienen el control sobre lo que se decide. Es un tema peliagudo. No es agradable que no te dejen jugar. Ellos no han hecho nada malo.
-Desde hace un tiempo, ¿siente que tiene más opciones para jugar contra los tres grandes, Nadal, Djokovic, Federer.
-Bueno, ahora diría que es más 'Big Two' que 'Big Three'. Y estos dos, Nadal y Djokovic, están todavía por aquí, jugando muy bien. En muy buena forma aparentemente. No creo que vayan a desaparecer pronto, están jugando bien. Son un gran obstáculo cuando he jugado contra ellos. Hacen muy dura la competición. Pero tenemos diferentes armas con las que puedes contraatacar y los innovadores estilos de juego que salen ahora pueden jugar a nuestro favor.
-En los torneos de Masters 1.000 ahora hay nombres diferentes en las copas de campeones, ¿es bueno para el tenis?
-Sí, desde luego. A la gente le gusta mucho ver nombres diferentes. Cuando ganas durante tanto tiempo, puede que la gente se canse de eso, y cuando aparece algo fresco y diferente, lo vemos en otros deportes, te da más opciones de hacer un buen resultado.
-Pero siguen muy consistentes semana tras semana cuando juegan.
-Desde luego. Y eso es lo más difícil en el tenis. Es con lo que tienes que pelearte en este deporte. Siempre estás sufriendo.
-También han surgido diferentes personalidades: la suya, melena, revés a una mano; la de Medvedev; ahora la de Alcaraz... ¿se necesitaba un refresco también de esto?
-Sí, por supuesto. Cada uno de nosotros tiene algo diferente. No creo que fuera muy interesante si todos fuéramos iguales. Algunos somos introvertidos, otros más extravertidos. Algunos somos mejores competidores que otros. Personalmente me gusta esto. Y también me gustaría que algunos jugadores no fueran tan diplomáticos como son. Creo que muchos jugadores son diplomáticos y no quieren meterse en problemas. Pero eso hace el tenis interesante. Queremos ver eso, que la gente se exponga en ciertos momentos, que expresen su opinión y que se abran. Para encontrar soluciones a situaciones difíciles y problemas que tenemos en nuestro deporte, ahora y en el futuro. Que es el objetivo final de lo que estamos haciendo.
-Ha ganado dos Masters 1.000 y fue finalista en Roland Garros 2021 -perdió con Djokovic-. ¿Se siente cada vez más cerca de levantar un Grand Slam?
-He estado muy cerca. Espera y veremos. No se puede decir nada sobre esto porque depende de muchas cosas: cómo estoy yo, mi nivel de tenis, contra quién juego y si ese jugador de repente está en el mejor momento de su vida. Y también tengo que sobrellevar que eso ocurre en cada torneo.
-¿Cuánto tiempo se le queda la derrota en la cabeza?
-Algunas veces más, otras menos. Depende de lo dolorosa que haya sido la derrota. Todas las derrotas son dolorosas, por supuesto. Y sería extraño que no te lo parecieran cuando las sufres. Soy una persona a la que le duele mucho perder, pero también intento encontrar soluciones cuando pierdo. Ver cómo y dónde lo puedo hacer mejor, en aspectos tácticos y técnicos, estratégicos, que puedes usar la próxima vez para el siguiente rival. Todas y cada una de ellas las he puesto después a mi favor. La derrota a veces es muy buena.