Jessica Bouzas debuta en la Caja Mágica derrotando a Badosa

Fue a partir del segundo set, dice la tenista, cuando logró encontrar su juego. Sacó su tenis a relucir y le regaló a los espectadores de la Caja Mágica una batalla digna de mención. Asegura haber empezado aquel duelo cohibida por la inmensidad de la Manolo Santana, pero juego a juego, la gallega ha demostrado que el suyo puede ser uno de los recorridos más interesantes de este torneo.

Bouzas, de 21 años, se encuentra ahora mismo entre las 100 mejores raquetas de la WTA. A pesar de su indiscutible éxito en esta primera ronda, no se atreve a aventurar nada sobre el futuro, «no me gusta estar pendiente de nada más allá del ranking, voy partido a partido», asegura. La tenista ha irrumpido en la escena para desplegar su talento y hacerse un hueco entre las mejores, un camino difícil en el que uno de los obstáculos más grandes es sobretodo uno mismo. «Hay tenistas a las que les cuesta menos creer en su éxito, a mi me cuesta más pensar que estoy aquí. Poco a poco confío más en mi tenis», afirma.

Hablando sobre sus referentes en los pasillos de la Caja Mágica, un risueño Rafa Nadal pasaba por detrás de Bouzas y ambos compartieron un momento cómplice, «Rafa es un referente, por supuesto, para todo el tenis mundial, y Muguruza también». Para ella, estos son algunos de los compañeros que forman parte de los `dioses´ del tenis. Su primer recuerdo de este deporte es el de entrenar en el club de su pueblo, en Galicia, bajo la lluvia y llegar a casa para escurrirse el pelo empapado.

No es de rituales ni de manías, siempre hace el mismo entrenamiento de la mano de su actual `coach´Francisco Javier Martí Hernanz que, asegura Bouzas, se aleja de los focos, la atención mediática y nunca busca la foto final, pero es un pilar imprescindible en su juego. «Tengo una confianza enorme en él, tenemos una relación muy estrecha, lo que es súper positivo porque me da una confianza extra», dice la tenista.

Lejos de cantar victoria, Bouzas se reserva los vítores para más adelante, por ahora su vista está puesta en su próximo reto, que tiene nombre, apellido y un título de Grand Slam. Jelena Ostapenko será la próxima rival de la gallega mañana en la Caja Mágica, Bouzas asegura tener ganas de dejarlo todo en la pista, tal y como ha hecho. «Ahí es donde hay que demostrarlo todo», concluye