Djokovic no jugará el Mutua Madrid Open

Desde su entrada en el circuito y descartado ese primero curso profesional de 2006, solo hay un par de excepciones a ese comenzar el año de Djokovic con alegrías tempranas: 2018 su primer título llegó en julio, en Wimbledon; y en 2022, en Roma.

En este curso, después de caer en semifinales del primer Grand Slam de la temporada ante Sinner, cuando llegó a decir que había sido uno de los peores partidos que recordaba jugar en un torneo de esta categoría, tampoco pudo amarrar título alguno en las siguientes semanas. En Indian Wells se vio sorprendido por Luca Nardi (123 del mundo en ese momento) en segunda ronda y decidió darse un respiro saltándose la parada de Miami.

Quería renovar las energías para encarar la gira de tierra batida con ilusión, y así pareció empezar en Montecarlo, pero en semifinales no pudo con Casper Ruud. Y sin jugar ningún torneo más, como estaba acostumbrado a hacer en Banja Luka, el serbio decide apostar toda su preparación en la arcilla en Roma, ausentándose por segundo año consecutivo del Masters 1.000 de Madrid.

En 2023 fueron unas molestias en el codo lo que lo obligaron a no acudir a la Caja Mágica; en esta edición de 2024, el jugador todavía no ha hecho oficial la causa de su baja, aunque bien podría ser esas dudas que le han ocasionado esta temporada tan atípica para él.

Con 36 años y 24 Grand Slams, acorta de esta forma todavía más su calendario, aunque nadie duda de que intentará llegar en plenas condiciones a Roland Garros, donde defiende la corona lograda el año pasado. En este trayecto, el serbio también observa hacia atrás de la clasificación con recelo, pues Sinner lo acecha con apenas un puñado de puntos para defender en esta tierra y él, sin embargo, defiende los cuartos de Roma y los 2.000 del título en la Philippe Chatrier.