La seria bronca de Nadal al juez de silla en Madrid: «Llama al supervisor, por favor»

Era el primer set, en los momentos más tempraneros del encuentro. Aún con 30-15 del segundo juego del choque contra De Miñaur, el juez de silla Fergus Murphy consideró que una bola devuelta por el australiano había entrado. Nadal no opinaba así, y comenzó un intercambio de palabras que se escuchó perfectamente en toda la Caja Mágica.

Antes decenas de personas, entre las que estaba el Rey Felipe, Nadal se puso a gesticular y discutir la decisión. «No te he visto pedir ningún challenge (revisión)», le reclamó el árbitro. «¡He parado y marcado la bola!», le protestaba Nadal, en un intento de lo que debería haber sido una revisión del ojo de halcón.

El debate se enturbió por una cuestión formal. Nadal insistía en que no tenía que decir explícitamente la palabra 'challenge', mientras que el juez afirmaba todo lo contrario. Llegó a tal punto la cuestión que el tenista español pidió que bajara un superior, como si de una protesta en un comercio se tratase cuando se pide que llamen al encargado. «Llama al supervisor, por favor», remató.

Y Nadal llevaba razón: la realizacón mostró que, como se quejaba el español, la bola había sido mala y por tanto no debía sumarse el punto a favor de De Miñaur.

Nadal no olvidó lo ocurrido, y habló con el citado supervisor para quejarse de la actitud de Murphy al que, según se deduce por sus palabras, ya le tenía cierta ojeriza del pasado.

«Lo que sí puedes hacer es decirle lo que hace mal, díselo para los siguientes partidos. Siempre es lo mismo con él», se lamentó el manacorense, que ya ha tenido otras sonadas polémicas con otros jueces de silla. Uno de los más conocidos es el brasileño Carlos Bernardes.