Así es el nuevo tenis: mascarillas, distancia de seguridad y tres recogepelotas

Y el tenis, que en juego por suerte sigue siendo el mismo, deja estampas a las que costará un poco acostumbrarse. Como la llegada de los jugadores a un minuto del comienzo del partido, ataviados con mascarillas que dejan en sus raqueteros. Dentro de estos, sus propias bebidas y gel desinfectante, y toallas que situaban en las vallas. No hay sillas al fondo ni recogepelotas que se las ofrezcan entre punto y punto.

También mascarilla para el juez de silla, sin sus compañeros de línea , los entrenadores de los tenistas, situados fuera de la pista, y los tres recogepelotas (uno en la red y los otros dos uno en cada fondo) a los que también se les obligó a llevar guantes para evitar los contagios por la pelota.

Ya no hay seis pelotas, sino tres por juego, pero cambian con cada turno de saque, para evitar también las infecciones. Y sin público, por supuesto . Así que las conversaciones entre juez y tenista o entre los propios jugadores son ahora audibles más allá de los susurros. El nuevo tenis también se acostumbra ya a cambiar los saludos de mano por los saludos y felicitaciones de codo .

El juego, el menos, no ha dejado de ser lo que era. E impuso De Miñaur su gran estado de forma en el primer encuentro, con un 6-2 y 6-3 ante Andújar que evidencia una buena puesta a punto del australiano, que pasó el confinamiento en Alicante. En el segundo encuentro, Bautista estuvo más acertado al final de la tarde que Carreño (6-4 y 6-4), aunque este se levantó de un 2-5 en el segundo set hasta un 5-4 y obligó al de Castellón de la Plana a esforzarse hasta la tercera bola de partido.

Para el sábado: a las 13.30 horas, Pablo Andújar-Roberto Bautista, y a las 15.30 horas, Alex de Miñaur-Pablo Carreño. Ya el domingo: Bautista-De Miñaur a las 13.30 horas y Carreño-Andújar a las 15.30.