«La altura de Madrid favorece a los españoles»

Medina debutó sobre la tierra batida del Mutua Madrid Open con una cómoda victoria ante la búlgara Tsvetana Pironkova (6-0, 6-2). No deja de sonreir cuando le preguntan por la tierra azul , tan conocida por todos más por lo que se habla de ella que por lo que lleva formando parte del circuito.

«Llevamos cien años de historia jugando en tierra roja y ahora con el cambio al azul a lo mejor a la gente que está acostumbrada a hacer su rutina le choca», dice la tenista. Para Medina el primer contacto con la innovadora superficie supuso un gran choque al no ser capaz de resbalar: «No podía porque la veía azul y me recordaba a la pista de Australia —pista dura—. No me daba para meter el pie, pero después de entrenar un par de veces ya me he acostumbrado ». Medina considera que jugar en Madrid —a más de 650 metros de altura— favorece a los jugadores españoles, «porque se adapta más a su estilo de juego».

No hay duda que la trigésima raqueta del mundo se adaptó al Mutua Madrid desde el primer día de torneo, tanto como «singlista» como con Arantxa Parra de pareja en el cuadro de dobles. La rumana Sorana Cirstea (número 40 en la WTA) será su próxima rival, después de que ésta en la ronda anterior sorprendiese sobre la francesa Marion Bartoli, séptima del mundo. «Será complicado, su última victoria ha sido muy importante , intentaré dar lo máximo de mí», asegura la tenista.

La valenciana confiesa tener las manías de entrar a cancha con la raqueta en la man o y sentarse a la derecha del árbitro. A la última a la que saltó antes que a la azul fue en Portugal. Medina llegó a Estoril para revalidar el título de campeona pero otra española, Silvia Soler, consiguió arrebatarle hasta un punto de partido.

No obstante, no parece afectada cuando recuerda el encuentro: «Estuve muy competitiva, por lo que acabé contenta. Además así he tenido mucho más tiempo para preparar este torneo». De momento se nota en los resultados, también como doblista, donde junto a su paisana, Arantxa Parra, ha pasado de ronda, lo que supone un impulso de cara a los próximos Juegos Olímpicos , donde formarán pareja.

Medina convence a cualquiera cuando habla de los encuentros de dobles: «Cuando son partidos buenos son muy llamativos, muy interesantes, de verdad». La tenista critica que estos duelos estén tan poco valorados , dice que a veces parece que para lo único que sirven es para tapar horas en los cuadros de juego de los que saltan a cancha en solitario.

A pesar de que no se declara futbolera sigue al Valencia y no se pierde un choque entre el Real Madrid y el Barcelona, en los que no duda en apoyar a los blancos, siguiendo la estela de su compañero de torneo Rafa Nadal. Medina dice de él que espera que sea el campeón del Mutua Madrid Open , «porque creo que como a él a mí también me han dolido las derrotas del año pasado y se merece ganar», asegura.

Se declara ser una usuaria muy activa en Twitter, donde trata de evadirse del mundo de las raquetas y escribir sobre cualquier otra cosa. Su «smartphone» la espera en cuanto el último punto se decide . Entra al vestuario y aunque dice que no llegaría a pensar que romper su ritual sería motivo de derrota, trata de utilizar siempre la misma ducha. Eso sí, las fotografías cuando se haya peinado.