Vinicius-Valencia, un reeencuentro de alta tensión

«Nuestro planteamiento es ir a jugar un partido de fútbol, no vamos a una guerra, ni a un sitio en el que nos tengamos que llevar escudos, ni cascos», destacó en la previa del partido Rubén Baraja, técnico del Valencia.

En la grada del Bernabéu habrá cerca de 600 aficionados del Valencia, a los que el club ha pedido por carta que «den ejemplo» y que animen a sus jugadores «por encima de cualquier provocación»: «Habrá muchos ojos y muchas cámaras pendientes de nosotros».

«En el vestuario no hemos hablado de ese tema. Solo del Valencia, que es muy buen equipo. Los aficionados que vienen aquí tienen que hacerlo con la máxima tranquilidad», dijo sobre el asunto Carlo Ancelotti, que afronta el partido con muchas bajas. Al sancionado Rudiger y a los lesionados Kepa, Courtois, Militao, Tchouameni y Ceballos se unió ayer Arda Guler, de nuevo fuera de combate por un por un problema muscular.

«Desafortunadamente ha pasado esto. Antes del partido contra el Braga no parecía nada, pero le sigue molestando. No es algo serio, pero el jugador está deprimido porque es joven, quiere jugar y quiere aportar. Es un paso atrás. No es una recaída de la vieja lesión. Tenemos todo el parón para intentar recuperarlo lo mejor posible», declaró el técnico italiano en su rueda de prensa sobre la lesión del turco.