Fútbol
El plan Bellingham de Xabi Alonso: jugar de '10', ayudar en la construcción y potenciar su llegada al área
Real Madrid
El inglés, que no está convocado por Inglaterra, aprovechará estas dos semanas para hacer la pretemporada que no pudo hacer en agosto por la operación de hombro
Alonso le considera un centrocampista ofensivo que debe darle vuelo a su llegada al área y a su asociación, pero también quiere que sume en la generación de juego
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Xabi Alonso felicita a Jude Bellingham tras la victoria frente al Villarreal
Xabi Alonso no es Carlo Ancelotti. Ni para lo bueno ni para lo malo. Igual que el italiano no tenía pudor en reconocer, de vez en cuando, sus errores, al tolosarra no le sucede lo mismo. Lo hace también, pero a su manera. El sábado, ... después de la victoria del Madrid ante el Villarreal, partido en el que Bellingham solo jugó veinte minutos, como en Almaty, Xabi asumió que la titularidad del inglés en el Metropolitano no fue su mejor decisión como entrenador. No lo verbalizó, pero tiró de algún que otro eufemismo para confesar entre líneas que el inglés, después de más de dos meses de baja y una delicada operación de hombro, no está todavía para competir al cien por cien y, ni mucho menos, para hacerlo en un partido de la exigencia de un derbi en campo hostil.
Al derbi llegó Bellingham con solo 1 minuto de juego ante el Espanyol y 19 frente al Levante. Participaciones residuales insuficientes para sentar a Mastantuono y hacerse dueño del frente ofensivo blanco. No se miente si se analiza ese derbi en un once contra diez a favor de los rojiblancos. A Xabi le pudieron más las ganas que la cabeza. Como le sucedió ante el PSG en la semifinal del Mundial de Clubes. Dos alineaciones políticas castigadas duramente. En imagen y en resultado.
Su ausencia en el once de Champions ante el Kairat y frente al Villarreal en Liga fue un acto de desagravio de un entrenador inteligente que sabe reconocer que se ha equivocado, aunque ante los medios le cueste expresarlo de un modo elocuente. Pero eso no es lo relevante. Agua pasada no mueve molino, y Xabi tiene ahora por delante dos semanas de margen para que Bellingham coja el tono físico necesario que le haga irrumpir en el once sin prebendas que no necesita.
«A la vuelta, con dos semanas más de entrenamiento, va a estar mejor día a día y va a ser importante para la fase de octubre. Ahora tenemos ese tiempo porque se ha perdido gran parte de la pretemporada. Tenemos un calendario intenso por delante con Getafe, Juve, Barcelona… y le vamos a necesitar», dijo Xabi el pasado sábado. Se olvidó del Liverpool en Anfield, otro partido de aúpa para después del parón, en el que el calendario se le empina a los blancos. Tener ahí al mejor Bellingham, o a una versión alta del inglés es muy importante para Xabi.
Centrocampista con recorrido
Alonso ha remarcado en distintas ocasiones que a Jude le ve como un centrocampista ofensivo capacitado para abarcar las dos zonas, la de elaboración y la de finalización. Tiene piernas, pulmones y calidad para abarcar más campo que otro tipo de centrocampistas y ser desequilibrante. Un jugador que considera flexible y polivalente, y serán esas las virtudes que busque potenciar el tolosarra: «Algunos jugadores son más estáticos y Jude no es de esos», asegura Alonso
La versión que más le ha gustado a Xabi de Bellingham es la que se vio con Ancelotti en la primera temporada del inglés en la capital de España. Pero Alonso también tiene en su retina a ese Jude que en el Borussia, contra en el que jugó en su primera temporada como entrenador del Bayer, ayudaba al equipo cuando necesitaba imaginación en la creación del juego.
Un papel exigente el que le tiene preparado Xabi a Bellingham porque entiende que tiene las cualidades necesarias para apretarle. No es lo mismo Ceballos que Jude. O Arda que Jude. Tienen características y, sobre todo, físicos distintos. El más privilegiado es el de Bellingham y por eso Xabi entiende que debe exigirle más que a utrerano o turco. Eso incluye también una cuenta goleadora de, como mínimo, dos dígitos.
Un Ceballos y un Güler que, salvo cambio de idea de Alonso, pagarán la indiscutible titularidad del inglés cuando ya esté al cien por cien. Todos no caben, y aunque en estos últimos partidos ambos se han hecho con un hueco en el once, uno de los dos caerá con la entrada del ingles. Así es el plan Bellingham de Xabi Alonso: jugar de '10', ayudar en la construcción y potenciar su llegada al área para sumar goles y asistencias.