Ancelotti: «Antes de la final comeré brócoli, salmón y pasta, y el corazón se pondrá a 120»

«Es una semana para disfrutar. Llegar a una final siempre es un éxito, pero nosotros no pensamos en lo de ser favoritos. A la final de la Champions han llegado los dos mejores equipos de la competición. El Borussia es un conjunto muy completo. Ha eliminado a equipos de gran calidad como Atlético o PSG. Tiene compromiso, actitud, velocidad, puede presionar, jugar en transición, tiene chicos jóvenes como Sancho o Adeyemi que son rápidos. Será una final para pelear, luchar y sufrir, como todas las finales, pero me da confianza que mi equipo está en modo Champions».

Ancelotti disfrutara de aquí al sábado, cuando el sudor frío recorra su cuerpo. Tiene antídoto, pero no suele funcionar: «Es mi novena final entre jugador (3) y entrenador (6) y siempre es igual. El día del partido llegará el miedo y yo tengo mi rutina. Comeré brócoli, salmón y pasta, luego una hora de siesta, si es que puedo, y antes de la charla el corazón empieza a subir hasta 110-120 hasta el inicio del partido que es cuando vuelve a su ritmo normal».

Ancelotti podría llegar el sábado a su título número 13 con el Madrid, a solo uno de los 14 trofeos de Miguel Muñoz. Uno de los mejores entrenadores de la historia del club blanco, que en su día formó parte de aquel gran Milán de Sacchi que evitó que la Quinta del Buitre ganara una Copa de Europa, con aquel 5-0 en San Siro en el que él participó con un gol: «No estoy en deuda con el Madrid por haberle marcado un gol… Yo soy un aficionado más de este club y, además, tengo la oportunidad de hacer algo por el Madrid. Lo que siento aquí es especial y no puedo decir lo mismo de otros clubes en los que he estado».

Ancelotti, que dará la información necesaria, y no más, a sus jugadores para que ellos se olviden de todo lo demás y se quiten el estrés y la ansiedad de encima, puso el foco en lo personal para explicar el por qué de su éxito con esta plantilla: «Yo creo que un aspecto fundamental de la vida son las relaciones interpersonales con la familia, amigos, compañeros de trabajo… Y se tiene que basar en el respeto a la persona. Para mí es más importante la relación interpersonal que la profesional. Si no hay un buen ambiente no se puede hacer buen trabajo».

Ancelotti describió este camino hacia la final como muy parecido al de 2022: «Fue una fase de grupos espectacular, ganando los seis partidos. Luego hemos tenido problemas con el Leipzig, donde el equipo no ha jugado muy bien. En cuartos hemos sido capaces de eliminar al mejor equipo de la competición con una defensa espectacular, y luego la remontada con el Bayern».

Camino con Kepa y, sobre todo, Lunin. Ninguno va a estar en la final de Wembley, aunque Ancelotti siga sin confesar que Courtois será el titular y le ponga humor al asunto: «Tomar la decisión de la portería es muy difícil. Los dos lo merecen y uno va a jugar y el otro estará en el banquillo. Este debate me gusta mucho. Esta semana que no tengo mucho que hacer (risas), me va a entretener este debate. Si te digo quién va a jugar se acaba el debate, así que no lo digo».