Suscribete a
ABC Premium

Real Madrid

La terapia mental que impulsó a Cristiano

Su serenidad al lanzar «el penalti» daba miedo, frío. Hace ejercicios de relajación y técnicas de respiración. Y su psicólogo es «el doctor Cristiano»

TOMÁS GONZÁLEZ-MARTÍN

Este muchacho de 33 años es bravo. Toda la Juventus se comía a mordiscos al árbitro inglés y Cristiano no se movía del punto de penalti mientras cerraba los ojos, miraba al cielo y se concentraba para lanzar el penalti más largo del mundo. Y ... no era de película, era de Champions. Chiellini, Benatia y Buffon lo tocaban la bota con las suyas, casi le pisaban. Le querían tocar la pelota. Y en plural también. Pero Ronaldo, como una columna griega, no se movía. Su mensaje era una demostración de seguridad. Les estaba diciendo, sin decirlo, que siguieran protestando, que se quitaran de ahí, que estaba esperando para fusilar el penalti por la escuadra. No pensaba quitarse. Es bravo el chico de Andorinha . Ahora debe refrendarlo ante el Bayern .

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia