El Real Madrid no cambiará de hábitos si viaja a Barcelona

El hotel se llena de seguidores que quieren hacerse una foto y saludar en carne mortal a algún jugador. El ambiente a lo largo del día es bonito, festivo en la sede de la expedición. Es una estancia alegre, llena de seguidores que quieren al Real Madrid y viven en Cataluña. Las plantas donde duermen los futbolistas están vigiladas, empezando por el ascensor, para que ningún aficionado suba y se quede por los pasillos para ver un minuto a sus ídolos.

Algunos intentan meterse en los cubos de la basura del hotel o se visten de cocineros para entrar en el edificio y respirar al lado de algún futbolista. Todo está controlado por Julio Cendal, director de seguridad del Real Madrid, que se conoce estas y otras mil argucias. El clásico espera al conjunto blanco el 26 de octubre en la ciudad Condal y, si el partido se juega finalmente ese día, el Real Madrid no cambiará sus hábitos.

Julio Cendal es Policía Nacional y lleva veinte años al mando de la seguridad del Real Madrid. Silencioso, con mil ojos concentrados en dos, este salmantino de visión inteligente y experiencia insuperable coordina todo el operativo del primer equipo, los desplazamientos, los partidos , los viajes del plantel de baloncesto y la ciudad deportiva. Ha organizado los traslados de la entidad madridista a Barcelona de este siglo y nunca hubo un problema grave. La única diferencia en esta ocasión se centrará en el aumento de la seguridad que las autoridades tienen previsto desplegar si el partido se disputa en el coliseo azulgrana, para evitar cualquier incidente.

El responsable de la seguridad del Real Madrid repetirá el mismo esquema de funcionamiento aplicado en tantas visias a Barcelona, una planificación basada en la discreción absoluta y en la rapidez de movimientos del autobús de la expedición cuando abandona el hotel y enfila la ruta hacia el Camp Nou. Bien coordinada con las fuerzas del orden, la seguridad del club tendrá planteados diferentes caminos hacia el estadio y posteriormente desde el campo hacia el aeropuerto.

Los jugadores de Zidane están dispuestos a jugar el día 26 en la ciudad Condal. «Ni un miedo a nada ni a nadie», señala el vestuario . El Comité de Competición decide.