Balonmano
Polémico final en el Alemania-España: un gol regalado para mejorar la clasificación
Europeo Femenino de Balonmano 2022
España ganaba de tres goles en los últimos segundos, pero encajando uno pasaban a la siguiente ronda en mejores condiciones
M. Z.
Madrid
El galimatías de los criterios de desempate entre tres equipos provocó una curiosa imagen en la resolución del grupo de España en el Europeo femenino de balonmano que se disputa estos días. La selección española necesitaba una victoria ante Alemania en el último choque ... de esta fase, con la peculiaridad, una vez conocido el resultado del Polonia-Montenegro (23-26), de que una victoria por uno o dos goles era mejor que otra por tres.
Si España ganaba de tres goles habría pasado a la siguiente ronda sin puntos acumulados, mientras que haciéndolo de dos también se plantaba en la siguiente etapa del torneo continental, pero con dos puntos en la mochila. Y de ahí la sorprendente imagen que se vio sobre la pista en los últimos minutos del choque contra Alemania.
De hecho, desde el inicio la selección española jugó el encuentro con un ojo puesto en las ventajas del marcador. Había que ganar, pero las ajustadas sumas de goles de los equipos que aspiraban a pasar a la siguiente ronda eran tan ajustadas que obligaban a mirar mucho al resultado.
Alemania partía con un +2, España con un -1. Polonia tenía un -1. Con una victoria por dos goles las españolas igualaban a las alemanas, que lograban también el pase, y dejaban fuera a las polacas, que de haber sido la diferencia de tres goles habrían adelantado a las germanas y habrían sido ellas las que conservasen los dos puntos para la siguiente fase.
Germany looked to have thrown away their chance at the #ehfeuro2022 main round...but what's this? 👀
— (Un)informed Handball Hour (@HandballHour) November 9, 2022
Jennifer Gutiérrez literally throws the ball away, Germany get another chance to progress and Spain move on to the main round with 2 points instead of 0 🤣 pic.twitter.com/geocRlshJt
En ese escenario es donde se produjo un final de partido cuando menos llamativo. España ganaba 20-23 con menos de un minuto por jugar y Alemania falló su ataque. Entonces las españolas regalaron la pelota con un extraño lanzamiento lejano para que su rival, apremiado también por las matemáticas, volviera a cargar contra la portería de España.
La posterior defensa española, algo relajada en el siguiente ataque teutón, desembocó en el 21-23, tanto en contra que incluso fue celebrado con los brazos en alto por alguna jugadora como Paula Arcos.
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