Véliz y Hannibal cumplen un mes sin minutos

Acabaron llegando durante el mes de enero Lucien Agoumé, Hannibal Mejbri y Alejo Véliz. Además subió al primer equipo Isaac Romero. Ante la dificultad que encontró Víctor Orta para dar salida a algunos futbolistas, los refuerzos tuvieron que ser inscritos con el filial o acabar sumándose al equipo a última hora como fue el caso de Véliz que, además, llegó con problemas físicos.

Y precisamente Quique Sánchez Flores con la posición a reforzar con la que fue más contundente fue con la de delantero. Tras el empate en Nervión frente a Osasuna, y pese a ya contar con Isaac Romero (autor del gol sevillista aquella tarde) pero no con En-Nesyri, el técnico desveló la hoja de ruta en sala de prensa: «Liberaremos la ficha de Rakitic y nos iremos de cabeza hacia un delantero. Son necesidades que notamos desde que hemos llegado, nos falta gol, nos falta delantero, no hay y los que están, están con dificultades de todo tipo». Parecía que sería el eslovaco Robert Bozenik el que firmaría por el Sevilla, pero finalmente Alejo Véliz llegó en calidad de cedido desde el Tottenham Hotspur.

El argentino ha estado lejos de ser considerado como una pieza relevante por parte de Quique. Sánchez Flores que apenas lo ha alineado en los minutos finales de tres partidos. Tras dejar atrás las molestias con las que llegó y participar en tres duelos de forma consecutiva, Véliz acumula un mes sin jugar habiendo sido además uno de los descartes de Quique Sánchez Flores en el duelo ante el Celta. «Nos ha dejado sensación buena por momentos y en otros momentos no tan buena. Tiene mucha competencia», decía recientemente el técnico en sala de prensa sobre el punta argentino. «Es valiente, atento, cuando salga sabe lo que tiene que hacer y eso me deja muy tranquilo», había dicho en contraposición antes del partido frente al Real Madrid. El Tottenham, al igual que Quique Sánchez Flores, está descontento con el desempeño del punta en el Sevilla y ya trabaja en encontrarle de cara al próximo curso otra salida.

Hannibal tampoco convence al entrenador. Es evidente puesto que, a diferencia de Agoumé y Véliz, siempre ha estado disponible y tampoco ha tenido muchas oportunidades. Únicamente fue titular en una ocasión ante las necesidades que marcaban las ausencias, y no dejó buen sabor de boca su aportación en aquella ocasión. Es más, desde enonces no ha vuelto a disponer de minutos y ha acabado siendo uno de los descartes del entrenador para el partido del pasado fin de semana ante el Getafe.

También estuvo fuera de la convocatoria en el partido de cuartos de final de Copa ante el Atlético de Madrid y Quique aseguró que necesitaba tiempo de adaptación. «Desde nuestro punto de vista debería dar un paso para entender lo que queremos y ver cómo nos organizamos, se ve mucho mejor desde fuera», comentaba el técnico tras aquello. Quizás el entrenador entiende que el futbolista aún no ha sido capaz de ubicarse o puede que el técnico entienda que no encaja futbolísticamente en su equipo. Lo único cierto es que el jugador cedido por el Manchester United apostó fuertemente por el Sevilla en enero. La propuesta de Orta le sedujo más que la del Everton y el futbolista había apostado por renunciar a acudir a la Copa de África con Túnez para poder seguir progresando, objetivo que, hasta el momento, parece lejos de cumplir a tenor de los minutos con los que ha contado. Por la situación económica que atraviesa el Sevilla y por la falta de confianza que muestra el técnico en el futbolista parece casi inviable que el club nervionense ejecute la opción de compra de la que dispone de alrededor de 17 millones de euros.

Con la salida de Fernando, Lucien Agoumé, de 22 años, llegaba con la misión de fortalecer el centro del campo y aparenta ser el único que convence al entrenador. Es de hecho el único de los tres que ha conseguido ser titular en dos partidos desde su llegada. Es también el que antes se sumó al equipo en enero. Podrían haber sido más los partidos que hasta este punto habría comenzado si no hubiera caído lesionado en Vallecas. Casi dos meses estuvo recuperándose de sus problemas físicos y ya en Getafe reapareció cuando Quique estimó que el equipo necesitaba más consistencia en la medular. El Sevilla también cuenta con opción de compra en su caso por valor de unos ocho millones de euros.

Los tres fichajes invernales no han conseguido aportar al equipo lo esperado lejos de lo que ocurriera el pasado curso cuando, en una situación similar a la actual, Lucas Ocampos, Bryan Gil, Pape Gueye y Loïc Badé fueron relevantes en el tramo decisivo e la temporada. Tanto fue así que, todavía con Monchi como director deportivo sevillista se aseguró la permanencia en su plantilla del central francés.