Acabó llorando... de alegría inmensa, de emoción, sí, pero también de dolor. Un dolor insoportable contra el que lucha por su Sevilla FC. Quién si no, no podía ser otro que don Jesús Navas González. Volvía a la titularidad contra el Getafe y lo hacía ... como extremo derecho, como en los viejos tiempos. El palaciego, en el minuto 23, enganchaba una volea marca de la casa con la diestra para batir a David Soria en el único tanto del partido. Tres puntos de sufrimiento y gloria, gracias al capitán.
Al término del choque, aún con los ojos vidriosos por las lágrimas, Navas explicó que «lo vivo más que nadie. La afición está sufriendo. Todos nosotros que somos de aquí, es duro, es difícil... en el gol le he pegado con todo, con la rabia de todo el sevillismo. Nos merecíamos una victoria. No hemos tenido esa fortuna en los partidos anteriores«, aseguró.
Entonces el periodista le preguntó por si estaba seguro de dejar el fútbol en diciembre como anunció. Navas se remitió a sus dolencias crónicas de cadera y dio una respuesta impactante: «Llevo años jugando con esto, intento darlo todo hasta que me aguante, y aportando. Creo que el trabajo de todos ha sido increíble... Los que están conmigo en el día a día saben mi situación. Dos días antes no podía andar, y el míster lo sabía. Estaba preocupado, me levanté por la mañana otra vez con ese dolor. Llevo con esta situación cuatro años, cada dos o tres días tengo ese susto. No puedo ni jugar con los niños. Cada día me levanto con la actitud de darle otra alegría a la afición«.
Para finalizar, tras un día complicado de protestas contra el palco y nervios, Navas miró a su hinchada con orgullo: «La afición está con nosotros. Lo ha demostrado como nos ha llevado, estoy muy orgulloso de todos los jugadores», concluyó.
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