Un Sevilla formado al estilo PC Fútbol: llega con Víctor Orta uno de los creadores del popular y adictivo videojuego

«Mis hermanos tenían una empresa de videojuegos, Dynamic, en la que yo no estaba metido», comenzó contando hace unos años en una entrevista al Diario AS. « A la vuelta de un viaje de Londres, mi hermano me regaló un Football Manager de los 80 , que por aquel entonces ya existían en Inglaterra. Jugaba sin parar a aquel juego y llegué a desarrollar un nivel de adicción preocupante . Me pasaba días enteros. Entonces fue cuando les dije que había que crear algo así en España », agregaba antes de concluir recordando que «por fin me hicieron caso». «Primero con el juego de Míchel y después con el PC Fútbol» , señalaba.

Crearon un videojuego en 1992 tan adictivo que incluso el propio Gaby Ruiz reveló en una entrevista al podcast Paquetes que Quique Sánchez-Flores no dormía por las noches durante un tramo de su vida por dedicarle tiempo a la gestión de su equipo en la realidad virtual. Luis Enrique también le dedicó mucho tiempo al videojuego durante su etapa como futbolista profesional. Comenzó haciendo él mismo las bases de datos de un juego que llegó a almacenar una cantidad increíble de los mismos y por este crecimiento imparable, se vieron obligados a contratar a más redactores que se repartieran las tareas y así otorgarle distintos parámetros a los futbolistas. Otro exfutbolista como Víctor Sánchez del Amo fue a las oficinas en las que se gestaba el PC Fútbol por curiosidad poco después de debutar y aprovechó para pedir «medio de broma» que se le subieran las estadísticas.

El juego, hecho por una decena de personas, tuvo un éxito brutal , se lanzaron ediciones para el fútbol italiano, el inglés o el argentino y como cara visible a Michael Robinson. Recordó Gaby Ruiz que tomaban en cuenta las muchísimas sugerencias que llegaban a las oficinas de los jugadores para implementarlas en el juego y que el teléfono que tenían habilitado «llegó a colapsarse y tuvimos que contratar más líneas».

«Creo que lo más raro que me ha pasado es haber creado el primer videojuego de fútbol de España, hace muchos años, y terminar convirtiéndome en uno de los personajes que se pueden ahora mismo fichar dentro de uno de esos videojuegos«, comentaba también en una entrevista a Infobae. »Alguien me mandó una captura de pantalla por Twitter y me dijo: 'Mira, Gaby, te puedo fichar'. Entonces aquello me impactó, porque eso fue un poco como cerrar un círculo . Tú creas un videojuego, y luego, con tu trabajo, terminas convirtiéndote en un personaje que entra a formar parte del interior del videojuego, y eres fichable«, decía también.

No es al único hombre de fútbol al que conoce gracias al PC Fútbol, pero Víctor Orta sí que es uno de estos con los que guarda más relación. «Víctor, como buen loco del fútbol que es, era un gran usuario y un verdadero loco del PC Fútbol« , confesaba también a Infobae. »Yo estaba entre las personas que sacaron adelante el proyecto y evidentemente mi cara le era familiar. Una de las cosas que más lo impresionó del PC Fútbol fue la base de datos . Yo me había puesto muy cabezón y pesado en que fuera un producto de referencia. Aquello impresionó a Víctor Orta y probablemente se podría decir que es uno de los motivos por los que estoy aquí «, rememoraba cuando ambos estaban aún en el Leeds trabajando juntos.

« Con Víctor me une una gran amistad . Ya había hecho alguna colaboración con él durante su etapa en el Elche. Pero ahora me llamó y me propuso una colaboración full time para incorporarme a su equipo de trabajo. Que una persona como él, con su trayectoria y su talento fuera de lo normal, me ofrezca algo así es espectacular. Como decía, es algo que nunca me hubiera atrevido a imaginar », había indicado a AS antes durante la etapa conjunta de Víctor y Gaby en Middlesbrough.

Gaby Ruiz es, por todo lo expuesto anteriormente, un hombre de la confianza de Víctor Orta. Un loco del fútbol que causó insomnio a toda una generación con un videojuego de gestión deportiva y que ahora tiene que poner de su parte para que el Sevilla de la vida real sea tan potente como los equipos más punteros de aquel mundo alternativo.