Sevilla Atlético - San Fernando: El filial saca la papeleta de la fe y pide sitio (4-1)

Por poco no llegó Nacho Quintana al centro de Juan María, en una clara consigna de Alejandro Acejo sobre la importancia de los carriles en este equipo, que los tiene buenos y veloces. Luego era Juanlu quien probaba un disparo con más ganas que acierto. Sufría el San Fernando sobremanera por la decidida intención del Sevilla Atlético de plantar cuantas más ocasiones, mejor, sobre el arco de Perales. Y respondían los azulinos con lucidez aprovechándose del espacio que había entre lateral y central -Kike y Juan María-, con un pase filtrado en el que Saúl se quedaba solo frente a Javi Díaz . Se hizo grande el guardameta sevillista, que evitó el primer gol en contra para alimentar las palmas del Jesús Navas. Avisaba Luismi por medio de uno de sus clásicos centros, y era el propio portuense quien firmaría un disparo envenenado desde la frontal que los sevillistas cantaron en gol mayor. Recibe, amaga, perfila su espacio y ejecuta ante Perales. Luismi tiene unas cosas que sólo tiene Luismi.

Iván se dejaba, mientras tanto, cada jirón de sudor en un colosal partido del solanero, por más que las dianas le siguiesen dando la espalda. Y en esas se vio igual Nacho Quintana, muy implicado en la labor defensiva de un equipo que, por medio de su cuerpo técnico, supo leer cada salida de balón ideada por los de Nacho Castro. Remataba, por cierto, Iván Romero un balón perdido que se iba fuera. Ay. Tanto como la que tuvo Cap i , previo pase de Iván, a bocajarro donde se le trastabilló la pena ente tanto rechace en el área pequeña. Aquello lo acabaría lamentando el vivero sevillista, que en una acción de peligro tras una primera parte casi inmaculada, caía en el error de cometer un penalti flagrante, obra de Valentino, en la única llegada de Calderón. Callejón convertía, empataba y cambiaba puntualmente la historia pero no el trasfondo: el Sevilla Atlético no merecía irse al descanso igualado tras ser bastante superior a su contrincante.

Alejandro Acejo apostaba por el desequilibrio e introducía a José Ángel, Zarzana y Carlos Álvarez, que buscarían con mayor frescura las botas rápidas de Iván. Y tenía que volver a ser él. Estaba escrito por más que tuviera que escribirse aún. Asistencia clave de Luismi para Juan María, que muerde la línea de fondo y encuentra al que tiene que encontrar. Al Iván de siempre. Al del doblete en la Isla de San Fernando hace ya demasiado. Al delantero titular que defendió Julen Lopetegui para ponerlo contra quien hiciese falta contra delanteros de talla internacional. Ante el campeón de liga, si es necesario. El solanero se reencontraba con su cita con la mejor de las celebraciones tras una gran intervención en el primer palo en la que volvió a demostrar que no se había ido. Que seguía aquí. Y todo eran sonrisas en un domingo de sol y de palmas en el corazón de Nervión, que tiene su arteria principal camino de Utrera. La fiesta sería total cuando Zarzana saldría a asomarse al balcón de Calderón, le enseñó la zurda y le dijo que allí, que allí la ponía para gozo de todos los sevillistas en un auténtico golazo para el Sevilla Atlético. Tenía rápidamente la oportunidad el San Fernando de poder reducir distancias tras un error de Javi Díaz que Saúl no aprovechaba por muy poco, yéndose lamiendo el palo su disparo. Y lo pagarían a precio de estreno los azulinos.

El cuarto sencillamente sería la obra maestra. Luismi pone la pelota donde Zaqueo recogerá hoy algunas de las sonrisas más inocentes de Sevilla, por medio de una vaselina prodigiosa, y Carlos la baja con la zurda -clase, temple, presteza-, es objeto de un penalti claro tras ser claramente derribado, pero allí que orbita Iván, que acaba con todas las dudas arbitrales dentro del área y la clava dentro. Otro doblete contra los azulinos. Otra vez Iván de verdugo , y hasta el final del choque, ocasiones de todos los colores para que el resultado fuera aún mayor. Una clamorosa de Carlos Álvarez, que pasó el balón por debajo de las piernas de Perales, que la detuvo hasta donde pudo. Al final, no cabía en sí de felicidad un Sevilla Atlético que tumbó a un San Fernando que se marcha del Jesús Navas sabiendo, con sus carnes en precario por la penitente goleada, que este filial piensa darlo todo hasta el final por más que al final sirva o no sirva. Eso lo dirá el fútbol. Merece la pena seguir cada paso de este camino de un equipo que se deja el alma.

Sevilla Atlético: Javi Díaz; Juan María Alcedo, Kike Salas, Juanmi, Valentino (José Ángel, m. 55); Lulo (Peral, m. 67), Capi (Carlos Álvarez, m. 55), Juanlu, Nacho Quintana (Zarzana, m. 55), Luismi (Santisteban, m. 78) e Iván Romero.

San Fernando: Perales, Calderón, Sergio Ayala, Juan Rodríguez (Agüero, m. 64), Saúl González; José Calderón (Crespí, m. 64), Marc Carbó, Sergio Cortés, Juanmi Callejón (Yerai, m. 75), Bicho y Ferrón (Santos, m. 45).

Árbitro: Lucena Perdomo, del Comité de Las Palmas. Amonestó con tarjeta amarilla a Marc Carbó, Iván Romero, Ayala,

Goles: 1-0 (m. 15): Luismi. 1-1 (m. 39): Callejón. 2-1 (m. 55): Iván Romero. 3-1 (m. 61): Zarzana. 4-1 (m. 64): Iván Romero.

Estadio: Jesús Navas.