Un partido guasita

Empezaba el partido fallando ocasiones el Sevilla, con un De Jong, que mide dos Papus, rondando la portería de Asenjo. Asenjo, no lleva años jugando Asenjo… Casi más que Deulofeu en la Sub-21. Como novedad, las gradas del estadio del Villarreal estaban pobladas después de muchos meses sin público. Conociendo la edad media de los aficionados amarillos, estarán todos vacunados.

«Papá, el de la radio dice que el Sevilla lleva 20 minutos atacando, ¡qué bien!»

¿Qué bien? Eso es que nos van a meter el primero YA.

El Sevilla tenía tanta posesión de balón y tantas ocasiones que lo normal es que el Villarreal marcara en su primera ocasión. Es la ley del fútbol . Por cierto, en ambos banquillos los dos vascos a los que más quiero en esta vida: Don Julen y Don Unai , uno de chándal como pa ir a comprar cómodo al Alcampo y el otro trajeao con chalequillo, con pinta como de venir de dar clase de violonchelo. Gloria bendita pa ambos, en cualquier caso.

Bien. Minuto 25. Llegaba por primera vez el Villarreal a la portería del Sevilla y no lograba marcar. Remataba fuera, de cabeza, otro de los futbolistas que me gustaría ver con la camiseta sevillona: Gerard Moreno, que ni tiene cara de llamarse Gerardo ni es moreno (va a Matalascaña a echá el día y de lo quemao que vuelve tiene que dormí esa noche de pie), pero es bueno tela. Otra ocasión de Moreno que detiene Bono haciendo lo que es, hasta ahora, el paradón del partido. Normal que minutos después Diego Carlos, que está más fuerte que la pipa mala del paquete, le diera un recadito con el brazo al crack del Villarreal.

Tras el típico descansito pa beber agua de la manguera, que ahora llaman los modernos «Cúlin Brei» (suena a un baile urbano que consiste en meneá er culito), llegaba el primer tanto del partido. «GOOOOOL DE BACCAAA», gritaba la radio.

¡BIEN!

Papi, Bacca ya no está en el Sevilla. Ha metido el Villarreal…

Yo me entiendo, niño.

Marcaba el 1 a 0 un exsevillón , como está mandao, y no se reprimía a la hora de celebrar el tanto. Di que sí, no te dejes llevar por esa modita hipócrita, Carlos Arturo.

El Sevilla se iba al descanso perdiendo, habiendo fallado las ocasiones más claras del encuentro, casi todas con De Jong como protagonista. El holandés es alto, rubio y guapo, pero falla má que el wifi del vecino. El carrusel de la radio hacía repaso de marcadores al descanso y en un coche atasco en la A49, a la altura de Huévar (que diría Julio Iglesias), se mantenía la siguiente conversación.

Papá, ¿por qué no juega Juan Jor… Yoan Yor, Juan…?

Covirán.

Eso. ¿Por qué no juega hoy Juan Covirán?

Porque hoy ha sido padre. Hace nueve meses que ganamos la Uefa y del alegrón, al llegar a casa, metería el tío el gol más importante de su vida.

Pero si él no marcó…

Pero sí metió, hijo. Cuando seas mayorsito teloxplico.

Empezaba el segundo tiempo y Gerard Moreno , que tiene toa la cara del malo de Gladiator, le pone un centro medido a Bacca para que éste haga el 2 a 0. Esta vez el colombiano no solo iba a celebrarlo sino que iba a hacer hasta el baile del serrucho. Los vacunados del Estadio de la Cerámica, locos de contentos, saltando sin saltar, para no lastimarse.

¡OTRO DE BACCA! ¡VAMOO!

Papá, que se lo ha vuelto a meter al Sevilla…

Ya, niño. Qué alegría más tonta, ¿verdá? Me alegro por él, ome, que solo había metido dos goles esta temporada…

Diego Carlos tiene un problema y es que está tan fuerte que ya puede dar una caricia, que el que la recibe va a sentir un collejón fuerte. Así llegó la expulsión del carioca (como los rotuladore) por segunda amarilla.

Aro a la calle , joé, si es un guarro.

Papá, ¡que es del Sevilla!

Niños, el ferplei debe prevalecer siempre por ensima de todo.

Solo corría el minuto 50 cuando el Sevilla hizo un Pablo Iglesias: Se fue del partido. Mientras, en la radio se cantaba gol de Borja Iglesias para el Betis.

La mierda del panda este que la dao por meté gole ahora. Será vaina…

Papá, el ferplei.

¿El qué? Mira palante, anda, y deja de da por c…

El Sevilla estaba con un jugador menos y pensando ya en las vacaciones de verano. Con este panorama marcaba el tercero el malo de Gladiator. Que alguien le diga a Rakitic que Monchi todavía no ha fichao a Gerard Moreno , que le ha dao un pase tremendo.

Pasaban los minutos y, viendo el percal, los sevillistas cambiaban de emisora para escuchar otros partidos más interesantes. Y menos mal, porque Bacca marcaba su tercer tanto, esta vez a pase de Bono.

4 a 0. El Sevilla recibe la mayor goleada de la temporada en la penúltima jornada. Puede que tampoco sirva ni pa enmarronar al Betis. Un partido guasita que acabó dando vergüensita.

Papá, ¿dónde vamos a ver el Sevilla-Alavés de la última jornada?

Ya no se habla de fúrbo hasta la Eurocopa, niño. Deseando estoy de ver en el apartamento de Matalascaña un Islandia-Bélgica con mi tajá.

¿De sandía?

Tamién.