Movimientos ineludibles en el mercado de enero del Sevilla FC

Matices pendientes desde el verano y lesiones inducen a reforzar la delantera y la zaga

Monchi saluda a la afición sevillista tras la victoria en el derbi AFP

10/11/2021
Actualizado 11/11/2021 a las 08:55h.

El último día del mercado de verano, el pasado 31 de agosto, horas antes de que se cerrara la ventana de inscripciones, Monchi compareció ante los medios de comunicación y se mostró franco con su propio trabajo: «No estoy al cien por cien ... contento con el resultado final de esta planificación. Nosotros empezamos esta idea en una reunión con presidente, vicepresidente, Julen (Lopetegui) y yo allá por finales de mayo y de aquella hoja de ruta se han conseguido muchas cosas, muchas de ellas con un esfuerzo tremendo por parte del club, pero ha habido matices que han hecho que no alcanzara la perfección en la planificación», confesó el director general deportivo, quien después de aquella rueda de prensa completaría un movimiento de salida más, el de la cesión de Luuk de Jong al Barcelona casi en el cierre de mercado, sin tiempo para reemplazar al holandés con otro jugador de ataque. Hubo algún intento exprés por Pablo Sarabia, pero éste ya se había comprometido con el Sporting de Portugal. También se sondeó la opción de Seferovic, pero finalmente no hubo nuevas incorporaciones.

La propia pista de Monchi y el devenir de las competiciones, con las temidas lesiones que ya han hecho acto de presencia, además de otras vicisitudes, impulsan al club a dar ciertos retoques al plantel en el próximo mercado de invierno. El director deportivo es consciente de ello, y Lopetegui , como es lógico, aprieta en lo que puede como primer responsable de un grupo altamente exigido en todos los frentes competitivos. Si la delantera ya andaba justa de efectivos con Rafa Mir y En-Nesyri, ahora con la lesión de larga duración del marroquí crecen las urgencias. El punta podría estar de baja hasta tres meses más y luego tendría que agarrar el ritmo competitivo en una fase crucial de la temporada. En-Nesyri estaría ausente en enero, con liga y copa de por medio, en un mes bastante peliagudo para el Sevilla FC porque también se le marchan a la Copa de África otro atacante como Munir y su guardameta titular Bono.

En las conversaciones entre Lopetegui y Monchi, la necesidad de reforzar la delantera es una realidad. Es más, se habla de llegadas, en plural. Y es que el ataque no es la única demarcación comprometida en el plantel. El entrenador sólo cuenta con tres centrales específicos: Diego Carlos, Koundé y Rekik. Hay otros jugadores que pueden adaptarse eventualmente al puesto, pero no cabe duda de que cualquier contratiempo desarmaría peligrosamente una línea trascendental en el equipo. La posibilidad de incorporar un defensa central también es un hecho.

En este sentido, hay que tener en cuenta igualmente la particular situación de Koundé . El Sevilla ya rechazó en verano una propuesta del Manchester City de 50 millones por el zaguero. Si en enero aparece la oferta deseada de 70-80 millones que convenza a todas las partes, la salida del francés tomaría cuerpo, por mucho que deportivamente suponga un revés importante desprenderse de un pilar del equipo a mitad de temporada. El Sevilla presentó en su junta de accionistas una deuda de 41 millones de euros y lleva dos años y medio sin ejecutar una gran venta, aparte de la de Bryan Gil al Tottenham por 25 millones. Si se diera la hipotética marcha de Koundé, Lopetegui necesitaría al menos dos defensas para cubrir el plantel.

Todo se valora minuciosamente entre los principales responsables del club de Nervión. El Sevilla transita en una temporada que puede poner en bandeja objetivos enormes. El propio devenir del equipo marcará en buena parte la pauta de la planificación invernal.