Cuentan las lenguas antiguas

El camino se hace al andar, que diría el poeta, para un Sevilla que presume de tener una doble y plateada década llena de éxitos que comenzaron a raíz de la temporada 2005-06. El curso que cambió la historia. Porque el Middelsbrough fue la primera víctima (4-0) y la ciudad holandesa de Eindhoven la primitiva plaza para comenzar una trayectoria de ensueño que por siempre llevará la romántica y pasional historia de Antonio Puerta , cuya zurda desató los nervios de Nervión para tumbar al Schalke 04 en semifinales y arrancar la primera página de la historia con nombres de oro del libro más sevillista en el que relucen firmas históricas como las de Luis Fabiano y Kanouté.

La primera fue especial por muchos motivos, y eso se nota con la evolución de los años, pero la segunda UEFA lograda por el Sevilla en la temporada 2006-07 nada tiene que envidiarle a esa primera copa que también levantó el equipo entrenado por Juande Ramos. El héroe inequívoco de la gran final fue Andrés Palop   , colaborador de ABC de Sevilla, que forzó la prórroga ante el Shaktar Donetsk con un golazo de cabeza que enloqueció a la parroquia sevillista para acariciar la cita definitiva. Por si fuera poco, Palop detuvo tres penaltis en la gran final ante el Espanyol jugada en Glasgow (2-2 y 3-1 en la tanda) con Alves, Adriano o Renato en ese once, por no hablar del capitán Javi Navarro, que fue quien acercó la gloria en Escocia entregando la UEFA cual nuevo tesoro del sevillismo.

Bajo el brazo de la temporada 2013-14 llegó la primera UEFA Europa League , un año después de no participar en competición europea. Y fue sin duda aquel el inicio de una época triunfal para un Sevilla de Unai Emery que logró tres copas seguidas, algo que nadie ha conseguido aún en la historia. Venció al Benfica por 4-2 en los penaltis tras empatar en el tiempo reglamentario (0-0), pero es que la singladura tuvo grandes momentos para los blanquirrojos, que derrotaron al Betis, su eterno rival, en unos penaltis inolvidables. Todavía quedaba aliento para vivir el gol de Mbia en Mestalla en aquellas semifinales antes de que llegase Turín, casualmente, antesala de la presente final en Budapest. Aquella tropa siempre será recordada por nombres como los del simpar José Antonio Reyes , Coke o Alberto Moreno, además de Rakitic y Bacca.

La cuarta Europa League de las vitrinas sevillistas fue ya la constatación total de que un año más el cielo estaba al alcance de la entidad. Nuevamente Emery , y ante el Dnipro ucraniano, el Sevilla amarró su cuarta Europa League con Banega, Gameiro y Krychowiak. La sede de la final fue Varsovia, donde Bacca hizo campeón al equipo que lo catapultó al estrellato de los estrellatoz (2-3). Como colofón, el Sevilla de Emery todavía tuvo tiempo para, tras caer de la Champions, doblegar a todo un Liverpool en St. Jakob Park (1-3), con futbolistas como Escudero o N'Zonzi, en otro torneo para el recuerdo que fue el quinto, penúltimo entorchado antes de lograr la sexta Europa League de su historia con Lopetegui en aquella final de Colonia. Batió el Sevilla al Inter de Milán (3-2) en la 2019-20, con nombres que suenan a historia reciente del sevillismo, como Bono, Koundé, Fernando o De Jong, además de Diego Carlos, que con una chilena inapelable mandó la sexta copa al corazón de todos los sevillistas que ahora sueñan por séptima vez.