La imponente visita al líder para buscar seguir creciendo

Desde que es entrenador del Sevilla, Quique Sánchez Flores no ha dudado en ningún momento en señalar que dispone de una plantilla repleta de buenos jugadores y que una de sus principales misiones en estos primeros meses al cargo del vestuario blanquirrojo es la de convencer a los futbolistas de que son mejores de lo que han podido mostrar sobre el césped y de lo que, consecuentemente, refleja la clasificación. No sólo del éxito de este plan depende que el Sevilla consiga un resultado positivo de su visita al Real Madrid, y es que son varias las ocasiones en las que el Sevilla ha jugado a buen nivel como visitante frente al cuadro merengue y se ha vuelto de vacío. Por otra parte, son también numerosas las veces en las que el cuadro nervionense ha sido vapuleado por su rival. Lo cierto es que ha habido historias de todo tipo en los 15 largos años que han transcurrido desde la última ocasión en la que el Sevilla ganó al Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

El equipo local, que homenajeará a Sergio Ramos poco antes del inicio del partido, cuenta con varias bajas relevantes de cara al partido de esta noche. Carlo Ancelotti no podrá tener a su disposición a Courtois, Militao, Alaba, Joselu, Carvajal, Bellingham y Camavinga. Incluso superior es el número de ausencias que presenta el Sevilla para este partido, que no tendrá en la expedición que viaje a Madrid a Marcao, Agoumé, Gudelj, Lukebakio, Acuña, Mariano, Rafa Mir y Lamela. El delantero murciano, sin embargo, queda fuera por decisión técnica. Es cierto que entre las bajas merengues hay un mayor número de titulares habituales que entre las sevillistas. No obstante, pese a ello y pese a que el Sevilla llega a esta cita inmerso en una buena dinámica de resultados, no aparenta ser el Bernabéu el escenario idóneo para que Quique Sánchez Flores consiga darle continuidad a la mejoría del equipo.

Y es que prácticamene todas las estadísticas dilapidan las esperanzas sevillistas de puntuar hoy. Más allá de la lejana última victoria nervionense en el Bernabéu ya comentada, el Sevilla intentará evitar que el de hoy sea el 46º partido consecutivo en el cual no es capaz de ganar como visitante a Real Madrid, Barcelona o Atlético de Madrid en LaLiga. No es ningún secreto que el cuadro blanquirrojo no da la talla habitualmente cuando juega lejos de Nervión contra los más grandes equipos de nuestro fútbol. Mucho ha llovido igualmente desde la última ocasión en la que Quique Sánchez Flores salió victorioso de una visita al Bernabéu, ya que ocurrió por última vez en 2005. Para colmo, se da la circunstancia de que el Real Madrid no ha perdido esta campaña ningún partido como local. Sólo ha sido derrotado en dos ocasiones este curso siendo ambas veces el Atlético su verdugo.

Con la principal novedad de la recuperación para la causa de Ocampos tras estar ausente el pasado fin de semana en Mestalla, no se espera que Quique Sánchez Flores varíe mucho su planteamiento. Colocar sobre el césped a un equipo con tres defensas centrales ha otorgado al Sevilla mayor seguridad defensiva tal y como demuestra el hecho de que sume dos partidos consecutivos sin recibir goles. Por mantener la estabilidad que ha marcado la mejoría global y conseguir optimizar las opciones que se tengan en fase ofensiva pasan las opciones de sumar en el Bernabéu.

Encarar todas estas adversidades supondrá un enorme reto para el Sevilla. Puntuar sería un alivio y ganar, un premio. El club del «nunca se rinde», capaz durante su historia de sorprender a los que lo aman y a los que lo odian por partes iguales para bien y para mal, busca poder seguir creciendo y espera poder birlar las suficientes dosis de anestesia de la casa del líder para vivir lo que resta de una decepcionante y desilusionante temporada con la mayor tranquilidad posible.