Una cláusula 'protectora' para Vargas como la de Lukebakio

Vargas llegó y pegó en el Sevilla FC. Desde su aterrizaje, es titular fijo en el esquema de su entrenador, Xavi García Pimienta, que lo ha convertido en un jugador insustituible. El suizo le ha inyectado un plus de competitividad a un equipo que no anda sobrado de calidad precisamente. Suma desborde, generación de ocasiones y posee un buen golpeo, además de ofrecer una capacidad de trabajo fundamental en el sistema defensivo. Se ha adueñado de la banda izquierda, aunque también se desenvuelve por dentro con gran habilidad. En definitiva, la llegada de Vargas ha supuesto una gran noticia para Pimienta. El helvético ha conseguido desplazar del once a todos los compañeros que competían en su posición, caso de Ejuke, Peque o Stanis Idumbo.

Junto a Badé y Lukebakio, Rubén Vargas apunta a completar un trío de futbolistas con valor añadido en este Sevilla FC. Por los dos primeros, el club ya echó para atrás en la última ventana de transferencias ofertas multimillonarias. Los jugadores deseaban continuar en Nervión y se quedaron, pero lo cierto es que el Sevilla FC no podrá aguantar demasiado tiempo en su comprometida situación económica sin realizar alguna gran venta. Los movimientos en verano serán inevitables. Mientras, el club amasa y protege al que debe convertirse en su siguiente gran activo, un Rubén Vargas que ya es una realidad en LaLiga y al que el Sevilla FC, como ha podido saber ABC, le ha colocado una cláusula de rescisión exactamente igual que la de Dodi Lukebakio, de 40 millones de euros. El contrato del suizo se extiende por cuatro temporadas y media, hasta junio de 2029.

Con dicha cláusula, el Sevilla FC puede estar relativamente tranquilo con Rubén Vargas, quien sigue adquiriendo galones en el equipo en tiempo récord y está llamado a recoger el testigo de Lukebakio como faro ofensivo ante la previsible salida del belga el próximo verano. Será complicado retener al ex del Hertha, que suma ya 11 goles en LaLiga a falta aún de un tercio del campeonato por disputarse. Ya en enero, el Nápoles sondeó su fichaje y el Al-Nassr de Arabia Saudí fue con todo a llevárselo. El equipo en el que milita Cristiano Ronaldo habría llegado a ofrecer más de 8 millones de euros netos de salario al internacional belga y estaba dispuesto a pagar alrededor de 45 millones de euros por el traspaso, una cifra superior a la de su cláusula de rescisión. No obstante, Lukebakio, de 27 años, comunicó al club que se quedaba, como rechazó Badé al Aston Villa de Monchi.

Rubén Vargas es el nuevo referente para un Sevilla FC en reconstrucción. El club sabe que el helvético puede ser otro cheque para el futuro, como su compañero Lukebakio. Lo protege, lo mima. Pero sobre todo se afana ahora para que el extremo siga creciendo dentro del equipo y abandere un liderazgo que el curso que viene puede ser necesario. Ya comienzan a saber en LaLiga cómo se las gasta Vargas tras dejar su sello durante casi seis temporadas ininterrumpidas en la Bundesliga alemana, a la que llegó muy jovencito, con 21 años recién cumplidos. En total, con el Augsburgo disputó 161 partidos en los que firmó 23 goles y concedió 19 asistencias. De padre dominicano y madre suiza, es uno de los pesos pesados de su selección, con 50 internacionalidades, en las que ha logrado ocho goles y ocho asistencias. Disputó las fases finales de las Eurocopas 2020 y 2024, así como el Mundial 2022.