Calcando números de descenso

A estas alturas, Sampaoli había conseguido quedar tercero en la fase de grupos y acceder a la Europa League que, meses después, salvó la temporada. No obstante, esa vía ya ha quedado descartada por completo este año y el Sevilla FC se lame las heridas mirando su próximo duelo ante el Getafe con la convicción de que hay que ganar sí o sí. A Diego Alonso el crédito de la afición se le acabó hace mucho, pero mantiene el del vestuario, aunque si acaba el año sin ganar en liga al menos dos duelos de los tres que quedan, su destitución se consumará finalmente.

Y es que el Sevilla coquetea con una estadística muy peligrosa, puesto que sólo ha ganado cuatro partidos en 24 duelos entre LaLiga, la Champions League, la Copa del Rey y la Supercopa de Europa. Hay dos precedentes con estos datos: la temporada 1967-68 y la 1999-2000, en ambas el equipo terminó descendiendo a Segunda división. En la 67-68, el Sevilla retornó por primera vez a Segunda división desde antes de la Guerra Civil y lo hizo por todo lo alto, quedando último de la tabla. La temporada la empezó Antonio Barrios en el banquillo, que fue destituido en la jornada 14 y Juan Arza lo sustituyó.

Dejando atrás el blanco y negro, el Sevilla volvería a registrar sólo cuatro victorias en 24 partidos en la temporada del cambio de milenio. En este caso, con Marcos Alonso en el banquillo y consumando lo que ha sido hasta la fecha el último descenso del conjunto de Nervión. Ahora, el Sevilla regresa a esos números. En la competición casera sólo suma trece puntos en quince jornadas, a falta de disputar el duelo aplazado frente al Atlético de Madrid en el Metropolitano. Con este balance, es un milagro que el Sevilla no se haya convertido en farolillo rojo, pero es que el descenso está muy barato. De ahí que aún haya esperanzas de reconducir el curso y de que a Alonso le quede una vida extra. El tercero por la cola es el Celta, que tiene diez puntos, mientras que el Sevilla tiene trece y está dos puestos por encima.

Por delante, los de Nervión tienen tres duelos ligueros que superar, es decir, nueve puntos. El objetivo del Sevilla es la de cosechar al menos seis de estos puntos para coger aire y empezar el año nuevo con otras energías. Getafe, Granada y Atlético de Madrid marcarán el futuro más inmediato de los de Nervión, a los que les urge puntuar de tres en tres. De llegar vivos al 23 de diciembre, todas las esperanzas se centrarán en un buen movimiento de plantilla en el mercado de invierno para airear un ambiente cargado de demasiado hastío. Aunque también habrá que confiar en que la suerte le cambie al equipo de cara al nuevo año y sea capaz de medrar en las dos competiciones en las que sigue aún vivo.