Es oficial: Conor McGregor está lesionado y se pospone su combate contra Michael Chander

El CEO de la UFC, Dana White, ha salido recientemente para dar las malas noticias, que han tardado en ver la luz puesto que los mandamases se encontraban buscando reemplazos para esta cartelera a marchas forzadas, mientras McGregor intentaba apurar los días para ver si era posible subirse a la jaula el próximo 29 de junio. Pero finalmente no ha sido así.

Eso sí, no hay tiempo para el luto ni las lamentaciones, y la maquinaria de la UFC se ha puesto manos a la obra para tratar de salvar una cartelera de suma importancia, ya que se celebra durante la International Fight Week (IFW), la semana grande de la compañía en Las Vegas. En este contexto, Dana White ha anunciado las dos peleas que se añaden al UFC 303: Jiri Prochazka buscará arrebatarle a Alex Pereira el cinturón del peso semipesado, mientras que Brian Ortega (número 3 del peso pluma) se enfrentará al talento en ascenso Diego Lopes, como combate coestelar.

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Álvaro G. Colmenero

Lo cierto es que, deportivamente, el evento puede llegar a ganar interés, la UFC salva los muebles y vuelve a demostrar su efectividad para enfrentar crisis de enorme calado, pero la realidad numérica es otra. Conor McGregor es insustituible. Y a nivel de expectación y audiencias, supone un gran golpe para la UFC, pues previsiblemente tendrán que devolver las entradas vendidas (la más barata estaba a unos 1.000 dólares), cuando ya era la taquilla más grande de la historia de la compañía. Por no hablar de los Pay-Per-View (PPV), que se estimaba que volverían a ser de récord y que ahora descenderán de modo estrepitoso.

Sea como fuere, las implicaciones deportivas son grandes en el UFC 303. El enfrentamiento estelar supone una revancha por el título, pues el brasileño Alex Pereira se impuso al checo Jiri Prochazka en noviembre de 2023 y este buscará su particular 'vendetta'. Por otro lado, Diego Lopes, brasileño afincado en México, irrumpe como un nuevo posible retador al enfrentarse a Brian Ortega, que es un contendiente legítimo y ocupa la tercera posición del ranking.

Por otro lado, habrá que ver el alcance de la lesión de Conor McGregor, pero la idea de la compañía es que el combate contra Michael Chandler se mantenga en una fecha más lejana. Así, un nuevo evento numerado a finales de agosto o de septiembre sería una posibilidad, aunque Nueva York en noviembre o Las Vegas en diciembre podrían ganar peso como escenarios posibles.