Lección de Morbidelli, quinto ganador en seis Grandes Premios

Por detrás, una bonita batalla por el podio, con Valentino Rossi, que lo acarició durante 26 vueltas de 27. Pero un renacido Pecco Bagnaia , después de romperse la tibia en Brno, consiguió la segunda plaza para reivindicar que las Ducati satélite funcionan, igual que pasa en Yamaha, mejor que las de fábrica. Y en la última vuelta, casi el último giro, Joan Mir se encaramó hasta la tercera plaza en detrimento de «Il dottore», que sigue esperando el podio 200 de su carrera.

Fue otro día nefasto para Fabio Quartararo y ya son cuatro grandes premios sin salir del agujero. Se cayó cuando luchaba por las primeras plazas y quiso salir de nuevo a pista para coger puntos. Al contrario, volvió a caerse sin posibilidad de recuperar la moto en esta ocasión. Tampoco fue un gran día para Maverick Viñales , que parecía haber cambiado su suerte en los entrenamientos, con el mejor ritmo y la primera posición de la parrilla. Pero el de Yamaha volvió a ceder demasiadas plazas al principio y fue viendo cómo le pasaban hasta seis pilotos.

Séptimo quedó Andrea Dovizioso . Pero el mal día de Quartararo lo encarama hasta la primera posición de la clasificación , otra muestra de este Mundial raro en el que cada circuito toma el color de una marca -KTM no ha podido reivindicarse en San Marino- y en el que todos los pilotos se han convencido de que puede ganar.