Moto2 - Gran premio de Gran Bretaña

Rabat también gana en cuerpo a cuerpo

El español supera a su compañero de equipo Mika Kallio en una bonita lucha a dos vueltas para el final, con Viñales tercero

Rabat también gana en cuerpo a cuerpo efe

abc

31/08/2014
Actualizado a las 14:57h.

Se confió Mika Kallio, la lucha venía por detrás, cuando él ya miraba hacia la victoria con seguridad. No se acordó de que Tito Rabat también sabe pelear en el cuerpo a cuerpo. En dos vueltas últimas de infarto, el español le demostró con qué ... clase de piloto se está jugando el Mundial. Rabat, eufórico, gana cinco puntos más sobre su compañero de equipo y, de paso, le manda un recado de quién manda en Moto2 .

Las lecciones que debería aprender Maverick Viñales en su primer año en la categoría media las está oferciendo él en cada carrera. Constante y paciente, el piloto de Páginas amarillas seduce por su forma de conducir, su agresividad controlada y su capacidad para luchar cada centímetro. Poquito a poco se fue metiendo entre los de delante, con Mika Kallio , que consiguió la primera posición y no quiso soltarla, Johann Zarco, desaprovechada su «pole», y Tito Rabat.

En un solo adelantamiento se plantó en la segunda posición, pero se encontró con un rival a su rueda difícil de despegar. Como una lapa, Zarco atacó por activa y por pasiva hasta que la lucha entre los dos derivó en que el más listo, Tito Rabat, los superara para intentar dar caza a un Kallio que se tomó las cosas con más calma de la necesaria. Vio que la lucha y el lío se montaban detrás de él y se relajó. Pero el líder del Mundial logró rendir muy bien en la última parte del trazado y recuperó medio segundo en solo dos vueltas.

Las mismas que le costó a Maverick deshacerse por fin de Zarco y asegurarse el podio. Demasiado esfuerzo había hecho para vencer al francés como para que la moto diera más de sí y pudiera dar alcance a los dos pilotos del VDS Racing Team. Pero se encontró con un regalo inesperado: Rabat no estaba dispuesto a ceder más puntos en el Mundial y sacó toda la adrenalina que tenía para demostrar que también es un piloto que sabe luchar en el cuerpo a cuerpo. Y vaya si lo hizo. En las dos últimas vueltas, los dos VDS se miraron de reojo, se encararon, se vieron en paralelo, se cerraron los huecos, levantaron la moto para no chocar. Un espectáculo en el que el protagonista final, Rabat, celebró con la rueda delantera en alto.

Más cabizbajo quedó el finlandés, líder durante buena parte de la carrera, que vio cómo el español aumentaba la distancia en la general con cinco puntos más. Y muy beneficiado con la batalla, Viñales, que no pudo entrar en el juego por muy poquito, pero que vio certificada su condición de gran principiante. Si no maestro ya de muchos.