Los Mossos localizaron en los dispositivos de Bartomeu los informes sobre Roures de I3 Ventures

Cabe recordar que la Policía catalana detuvo a Bartomeu en marzo de 2021, en el marco del denominado 'Barçagate', después de que meses antes la Cadena Ser destapase que la directiva del Barça, bajo su mandato, había contratado a I3 Ventures por varios miles de euros, para desprestigiar a los no afines al club y su junta a través de redes sociales. Ya entonces, el F. C. Barcelona reconoció haber contratado a la SL para servicios de monitorización de redes sociales, para estar al tanto de mensajes positivos y negativos sobre la entidad deportiva, pero negó que su propósito fuese difamar a terceros.

Ahora, aunque la instrucción del caso Barçagate aún sigue su curso, Bartomeu ha tenido que sentarse en el banquillo por las presuntas injurias a Roures. Durante su declaración como testigo, el empresario ha indicado que la única intención del contenido difundido en sendos perfiles fue perjudicarlo; «buscar de manera gratuita de ofenderme a mí, y tener repercusiones negativas en mi familia, mi entorno y mi trabajo».

Roures se enteró de la existencia de dichas cuentas a través de sus hijos. Entonces trasladó al Departamento de Comunicación de Mediapro lo ocurrido y contrataron a un perito para ver el alcance de las publicaciones así como su origen, Fue así como llegaron hasta I3 Ventures. «Ni me podía imaginar de dónde salía esto. En redes sociales, todo el mundo sabe que hay mucho descerebrado, diciendo cosas sin sentido, pero esta línea de actuación me sorprendió, porque disparaban por tierra, mar y aire sin ningún tipo de motivo», ha detallado a preguntas de su abogada.

Trabajadores de la SL publicaban en redes todo tipo de contenido, tras ser contratados por el club. También sobre Roures, tal y como han admitido ante el juez antiguos empleados de la compañía. Aunque estos se han limitado a justificar que se trataban de publicaciones en medios, antiguas o recientes, y también alguna caricatura, irónica o sarcástica, pero siempre «en tono humorístico».

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Algo en lo que no coincide el perjudicado, que ha detallado que «evidentemente», sí le afectó a nivel profesional por su repercusión. A diferencia de publicaciones falsas en medios tradicionales, frente a las que sí pudo ejercer su derecho de rectificación, no ocurre lo mismo con las difundidas en redes, ha puntualizado. «Te quedas sin recursos para contrarrestar eso y se hace precisamente por eso», ha reprochado.

Por eso motivo, y para evitar que dichas publicaciones pueden ampararse en el derecho a la libertad de expresión, Roures ha indicado que nada tenían que ver con informaciones, sino con «insultos y difamaciones». «Me parecía que era una actividad gravísima, que se estaba financiando con el dinero del club. No tiene ningún sentido que con el dinero del club, se ataque a los socios, como es mi caso». Fue el perito contrato por Mediapro el que descubrió que la cuenta en Twitter que cargaba contra Roures era un perfil profesional, no personal. Y que los detalles de edición era «muy elaborado», según ha detallado durante su testifical.

Por su parte, Masferrer ha asegurado que, hasta recibir la querella de Roures no tuvo «ni idea» del contenido de los tuits. Una querella que inicialmente se dirigió contra él y Bartomeu por injurias y calumnias. «Las calumnias decayeron porque se vio que las noticias publicadas eran de medios», ha indicado a preguntas de su defensa.

Mientras que Bartomeu, que ha sido el último en declarar, ha asegurado que en la única reunión que mantuvo con el máximo responsable de I3 Ventures para contratar sus servicios, «no se habló de Roures, ni de crear perfiles falsos, sino de monitoreo de redes sociales». Una decisión que llegó después de que Neymar abandonase el club en agosto de 2017, y ante el aluvión de críticas a la junta directiva en las plataformas. Así como las consecuencias del 1-O, cuando algunos jugadores no querían salir al campo y otros sí para disputar un encuentro.

En su derecho a la última palabra, Bartomeu ha apuntado: «Sin que sirva de precedente, hoy me he sentido identificado con Jaume Roures, por las dos cuentas que le afectaron al honor. No conocíamos el contenido de esas cuentas, lo vi cuando nos llegó la querella. Me pareció que alguien se había pasado un poco, pero el campeón soy yo, porque a mí más de 60 cuentas me han atacado. Y han afectado a mi familia y a mi empresa. Y unas nueve o diez cuentas aún siguen. Lo acepto y yo lo he sufrido mucho más que él. Todos tenemos que tener un poco de aguante y no tener la piel tal fina», ha concluido.