Luis De la Fuente niega conocimiento alguno sobre las presuntas coacciones a Jenni Hermoso

De la Fuente comparecía como testigo en una jornada en la que también habían sido llamados el ya exdirector de Comunicación de la Federación, Pablo García Cuervo, y su número dos, en la causa que se sigue en la Audiencia Nacional contra Rubiales por presuntos delitos de coacciones y agresión sexual. Fue llamado después de que la jefa de prensa de la selección femenina, Patricia Pérez, le ubicase en aquella reunión donde aseguró que también ella sufrió presiones.

Según fuentes jurídicas presentes en la declaración, el seleccionador ni siquiera entendía bien por qué había sido citado. Su comparecencia, que no ha superado la media hora de duración, ha girado en torno a la idea de que él había acudido al despacho de Rubiales para tratar un asunto relacionado con la siguiente convocatoria de la selección masculina.

Hablaron en una sala anexa al despacho principal, donde estaba teniendo lugar ese encuentro promovido por el departamento de Integridad y en el que estaba presente hasta el padre del presidente de la Federación. Ha afirmado, de acuerdo a las mismas fuentes, que pese a que hubo de pasar por esa sala para entrar y salir de la otra, no prestó atención a lo que allí ocurría.

En relación al resto de hechos objeto de imputación de Rubiales, De la Fuente, que iba en el avión con la selección desde Sidney, ha asegurado que no vio a nadie hablar con nadie, como tampoco notó nada. Del beso, conforme ha señalado a preguntas de las partes, se enteró por la prensa. Tampoco supo nada de presiones ni de comunicados.

Un desconocimiento similar, aunque calificado de «sorprendente» por las acusaciones, ha mostrado García Cuervo durante su declaración, apelando al «no lo sé» como respuesta a varias preguntas. En relación a la reunión de Integridad, ha incurrido en contradicciones con la comparecencia de Patricia Pérez, según las fuentes jurídicas consultadas por este diario: ha afirmado que ella compareció al encuentro libremente y que pudo chequear el resumen por escrito que se elaboró de su testimonio y promover los cambios que quisiera.

En cuanto al comunicado que lanzó la Federación la misma noche de la final con unas declaraciones de Hermoso que ella niega haber pronunciado o autorizado, García Cuervo ha asegurado que se redactó partiendo de las palabras que la jugadora había vertido previamente en una breve entrevista telefónica en la radio. Ha subrayado que la jugadora dio su visto bueno cuando le pidieron que bajase un segundo del autobús que trasladaba al equipo al aeropuerto. Sí ha concedido, no obstante, que ella lo hizo pidiendo a renglón seguido que la dejaran en paz.