La empresa española que ayudó a Queralt Castellet cuando no tenía dinero para seguir compitiendo

En 2019, la española alzó la voz para pedir ayuda. Seguía siendo una de las referentes mundiales del snowboard, pero no tenía el respaldo económico necesario para continuar con su carrera . O encontraba nuevos patrocinadores o tendría que replantearse su carrera. El SOS lo recogió Alberto Mohedano , CEO de la empresa española Carttec , que no dudó en ofrecerle la ayuda que buscaba Castellet . Desde entonces, las ruedas de los carritos de supermercado y aeropuerto que diseña y fabrica esta compañía afincada en Alcobendas , se convirtieron en el sustento principal de Castellet, que luce orgullosa su logo en la tabla con la que compite en cada prueba.

Carttec y Red Bull son sus patrocinadores principales, a los que se unió hace poco Iberdrola . También cuenta con la ayuda de Stern Moto , concesionario Mercedes en su Sabadell natal, y con la marca de tablas Play , que le facilita el material para llevar a cabo sus trucos en la pista. Un equipo que se completa con la ayuda de la Federación y la beca ADO, que a partir de ahora será una de las más altas del programa. Por la medalla de plata, Queralt recibirá 48.000 euros y mantendrá su beca sin importar los resultados hasta 2024.

La temporada de un rider de halfpipe apenas dura cuatro meses. Se extiende entre diciembre y marzo, con un circuito de Copa del Mundo que comprende cuatro o cinco pruebas, a las que se suman algunos torneos grandes como los X Games o el Burton US Open . Citas, todas ellas, sitas en estaciones de esquí exclusivas donde una noche de alojamiento puede irse a los 1.000 euros sin hablar de un lugar exclusivo.

Ganar una de las pruebas más prestigiosas supone alrededor de 20.000 euros para un rider, cuyos ingresos medios son de 60.000 euros en premios. Cifra que no permite dispendios a la hora de contar con un equipo amplio que en el caso de Queralt se reduce a su entrenador, su fisioterapeuta de confianza, su técnico de tablas y su responsable de prensa .

Los meses que no hay competición, Castellet se recorre el mundo para entrenar , lo que hace que solo pise España alrededor de dos meses al año. Otro peaje que pagar, sentimental en este caso, para poder vivir del snowboard.