Xavi, sancionado con dos partidos, estará de vuelta para el Clásico

Tras la expulsión en el Metropolitano, Xavi se dirigió al cuarto árbitro interpelándole «¿Qué te he dicho? ¿Qué te he dicho?», antes de enfilar el túnel entre los insultos de la afición del Atlético. Después, justificó su conducta: «No he dicho nada, intento ser pasional. Lo vivo, me enfado, quiero que gane mi equipo. Era innecesaria e injusta la expulsión, pero hay que aceptarla»

Tras la suspensión, Xavi volverá a dirigir un partido del Barcelona en LaLiga coincidiendo con la disputa del Clásico frente al Real Madrid, que se disputará el próximo 21 de abril en el estadio Santiago Bernabéu.

El Comité de Disciplina también se ha pronunciado respecto a las alegaciones del Real Madrid por la sanción de un partido a Vinicius, que vio la quinta cartulina amarilla en el Sadar frente a Osasuna.

Según denunciaba el conjunto blanco, el atacante brasileño «viene soportando de modo habitual actos de racismo, odio e intolerancia en todos los campos de fútbol que visita el Real Madrid», afirmando asimismo que viene «siendo habitual la absoluta pasividad del colectivo arbitral y de la propia Federación» y que «dicha desprotección y pasividad se evidencia en las reiteradas denuncias que esta parte ha tenido que interponer ante la Fiscalía General de Estado ante hechos que se repiten partido tras partido, sin que los árbitros dejen consignado los actos violentos, xenófobos y racistas en las actas de los partidos, blanqueándolos».

En concreto, respecto a la acción que supuso la tarjeta amarilla para Vinicius, ésta «se produjo pocos minutos después de que el jugador escuchara de forma coral y perfectamente audible, el cántico de «Vinicius muérete, Vinicius muérete». La actitud del Jugador con el árbitro no es más que fruto de la frustración e indefensión al comprobar la evidente pasividad del árbitro respecto de los cánticos que se estaban profiriendo contra su persona, actitud que, en ese momento, y dada la situación previa, se encontraba viciada por la evidente situación de odio que acababa de sufrir y por la nula proactividad del árbitro de castigarla», por lo el Real Madrid solicitaba «que se deje sin efecto la citada amonestación».

A pesar de las alegaciones del club de Concha Espina, desde el Comité de Disciplina se ha procedido a desestimarlas, manteniendo la sanción al delantero brasileño, ya que la mencionada «circunstancia fáctica de pasividad, de enorme gravedad, no queda en absoluto acreditada», entendiendo por tanto que «no resulta aplicable la provocación suficiente como circunstancia atenuante, pues la sanción de amonestación no admite grados en su imposición».