Víctor Muñoz, el canterano blanco llegado de la Masía con el que se ceba el madridismo

El futbolista fue el cambio elegido por Carlo Ancelotti para reemplazar al brasileño, que se retiró con visibles molestias. Apenas pocos instantes después de pisar el césped de Montjuic, Víctor Muñoz recibió un pase al espacio por parte de Kylian Mbappé, lo que le permitió a plantarse solo ante Szczesny en lo que parecía que acabaría siendo el cuarto tanto para el equipo. Sin embargo, el canterano mandó el balón por encima de la portería, desaprovechando una de las oportunidades más claras del partido, una acción que podía haber supuesto la igualada para su equipo.

Cuando Hernández Hernández hizo sonar el silbado con el pitido final, se pudo ver a Muñoz visiblemente afectado entre lágrimas, mientras sus compañeros le consolaban. Lo que no sabía es que lo peor le esperaba al terminar, cuando una oleada de críticas inundaron las redes sociales con frases como «Es malísimo» o «Debut y retiro».

La dureza de los comentarios fue tal que el canterano tuvo que cerrar los comentarios de sus perfiles para evitar recibir más mensajes de odio. No fue suficiente el martirio que, al llegar a Valdebebas, algunos aficionados del Real Madrid recibieron al autobús con una pancarta que decía: «Vergüenza».

La historia futbolística de Víctor Muñoz Villanueva (Barcelona, 2003) comienza en 2012 en el San Gabriel. Tras un corto paso de dos años, el FC Barcelona se interesó por él y decidió ficharle en 2014. Durante esa etapa, hasta 2017, llegó a coincidir con futbolistas como Fermín, Balde o Xavi Simons. Sin embargo, al llegar a la etapa de juvenil recibió una oferta del Real Madrid para incluirse en sus filas.

Ya en la capital desde 2021, el extremo izquierdo comenzó a ascender dentro del club hasta que, en la temporada 2023-24, Raúl González Blanco decidió incorporarlo a su equipo, con el que ha disputado 31 partidos, en los que acumula 10 goles y 7 asistencias.

Carlo Ancelotti, no muy afín a mirar en la cantera, decidió que Muñoz entrara en el campo para intentar remontar el resultado, por delante de Rodrygo, que vio todo el partido desde el banquillo.

Para bien o para mal, el futbolista blanco no olvidará su debut en Primera División, un tanto amargado por la reacción de los propios madridistas entre ánimos y desalientos.