Spectator in barcino
La Fachendosfera de Laporta
«Veintidós años después sigue aplicando el cínico método del 'haz lo que quieras, pero aprueba»
La verdadera historia de la muerte de Francisco Franco
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónUno de los tipos que más repugnaban a Josep Pla era el 'fachenda' (en catalán, 'fatxenda'). El campo semántico de lo 'fachendoso' está sembrado de vanidad, petulancia, fanfarronería, jactancia, arrogancia, chulería… pero su acepción más habitual en lengua catalana remite a la fantasmada, lo que ... detestaba Pla. En Cataluña, ser un 'fachenda' es lo peor que se puede ser. Según el tópico legendario, los catalanes son laboriosos, austeros, poco dados al farde gritón. Cuando era niño, si un jugador del Madrid dejaba sentado a un defensa del Barça, marcaba gol y lo celebraba con sus compañeros los culés comentaban aquello de «mira qué chulería». Ya no digamos si el jugador era Hugo Sánchez haciendo cabriolas… La 'fachendosfera' era la galaxia del club madridista, mimado por la Federación de Porta y el Colegio de Árbitros de Plaza. El Barça se pasó catorce años sin ganar una Liga porque, según la salmodia de nuestros mayores, «al Madrid le ayudan los árbitros, el equipo del gobierno, la vergüenza del país».
La 'fachendosfera' ha pasado de blanca a azulgrana con un presidente que convirtió la chulería y el trapicheo en su modus operandi. Recordemos que Joan Laporta Estruch hizo sus primeros pinitos cuando estudiaba COU en los Maristas del paseo de San Juan. Lo hemos contado en otras ocasiones, pero conviene no olvidar las señas de identidad de este personaje. Por si no lo saben, lo expulsaron por meterse en el despacho del profesor de Física, birlar el examen y pasar la fotocopia al resto de la clase. Se ve que aquel hombre suspendía mucho, pero gracias al listillo Laporta sus compañeros de clase pudieron trocar los temidos suspensos en sobresalientes. Demasiados sobresalientes para que la autoridad docente no investigara hasta descubrir al alumno tramposo y ponerlo de patitas en la calle: «Actitud negativa con respecto al grupo, faltas de respeto al profesorado, repetidas faltas de asistencia injustificadas y robo de exámenes», rezaba la carta de expulsión que recibieron sus padres.
En el libro '¿Qué quieres ser cuando seas mayor?' (2004) Laporta reconocía que aquella gamberrada le impidió estudiar Medicina -de buena nos libramos- y tuvo que recurrir al comodín de Derecho, que es la carrera que cursan quienes no saben qué estudiar. Subrayaba también que en su casa le decían «haz lo que quieras, pero aprueba». La máxima puede explicar la conducta de quien llegó a la presidencia del Barça engañando a la afición con el fichaje 'fake' de Beckham.
Veintidós años después, Laporta sigue aplicando el cínico método del «haz lo que quieras, pero aprueba». Un método que expresa con el histrionismo del 'fachenda'. El CSD que preside un tal Uribes, tal vez el peor ministro de Cultura de la democracia, acudió a salvar a un presidente acorralado por su incompetencia gestora. Gracias a la cacicada gubernamental y la espectacular victoria en Yeda, Laporta tomó aire para espirar victimismo y mantener con sobrados méritos su protagonismo en la 'fachendosfera conspiranoica'.
La galaxia 'fachendosa' no cabe, por prolija, en esta columna: cortes de mangas, alaridos que devolvieron al Laporta del eslip en aquel control de aeropuerto en 2005, lloriqueos… Tampoco cabe abundar en la conspiranoia, manido recurso del nacionalismo y la 'madriditis' culé (se gane o se pierda). El problema no es el populismo fachendoso, asaz documentado. Avergüenza que los socios sigan jugando al 'dónde está la bolita' presidencial. El equipo gana de cinco en cinco y el presidente se la cuela al 'más que un club' en la misma proporción. «Hemos hecho las cosas bien, hay una campaña contra nosotros…». Lo dijo Laporta, pero podía haberlo dicho Sánchez. Vivimos tiempos de fantasmas.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete