Una revolución que deja al Barça sin excusas

En el capítulo de bajas, Laporta se ha visto obligado a ceder con cesiones y abordar rescisiones de contrato ante la perspectiva de quedarse con futbolistas poco dados a rebajar sus pretensiones económicas en una salida del club azulgrana. El Barcelona solo ha ingresado 34 millones por las ventas de Coutinho al Aston Villa y de Aubameyang al Chelsea. Las dos operaciones son positivas teniendo en cuenta que al brasileño le quedaba un año de contrato y su sueldo era descomunal, y que el gabonés llegó libre durante el mercado invernal, por lo que su venta es ingreso neto, además de liberar masa salarial que permitía inscribir a Marcos Alonso y a Bellerín.

Mousa Wagué (HNK Gorica), Mingueza (Celta), Neto (Bournemouth), Riqui Puig (LA Galaxy) y Braithwaite (Espanyol) se han marchado con la carta de libertad, ya que no entraban en la planificación de futuro de Xavi. Incluso a Braithwaite le han tenido que finiquitar para que aceptara rescindir su contrato, Aunque el delantero pedía la totalidad de los dos años de contrato que le quedaban, finalmente ha aceptado poco menos de medio millón de euros ante la perspectiva de poder jugar en el Espanyol. Braithwaite ha priorizado su estabilidad familiar y quedarse en la Ciudad Condal por encima de aceptar ofertas más elevadas de Emiratos Árabes.

Las cesiones también han sido una solución para aligerar la masa salarial, aunque el Barça sigue pagando un porcentaje de las fichas de algunos futbolistas. Lenglet, con contrato hasta 2026, ha ido al Tottenham; Trincao (hasta 2025) jugará esta temporada en el Sporting de Lisboa, que tiene una opción de compra de 20 millones de euros; Alex Collado (2023) ha ido al Elche, que pagará la mitad de su salario; Umtiti (2026) jugará en el Lecce este año; y Dest (2025) aceptó la oferta del AC Milan el mismo día del cierre de mercado. De todos los que se han marchado cedidos, solo interesan, en clave de futuro, Abde (2026) que se marcha a Osasuna un año, y Nico (2026) que eligió personalmente marcharse al Valencia a pesar que Xavi le aseguró que contaba con él si se quedaba.

Aligerada la plantilla, el Barcelona ha sabido reforzarse con siete fichajes, en todas sus líneas a excepción de la portería. Y para ello han invertido 160 millones fijos más otros 20 en variables. La defensa queda completa con la llegada de Andreas Christensen (Chelsea), que llegó con la carta de libertad al acabar contrato, y Jules Koundé (Sevilla) tras el pago de 55 millones más 10 en variables. La nómina de centrales se completa con Éric García, Ronald Araujo y Gerard Piqué, al que Xavi le prefiere en otro rol, más alejado del terreno de juego. La posición más débil es el lateral diestro. Para reforzarlo ha llegado Héctor Bellerín tras lograr desvincularse del Arsenal. Junto a él estarían Sergi Roberto y algún central polivalente como Koundé o Araujo. La llegada de Marcos Alonso (tras lograr la carta de libertad del Chelsea) potenbcia el lateral izquierdo, que ya contaba con Jordi Alba y Abde.

Frank Kessie (Milan) llegó gratis para reforzar un centro del campo en el que hay mucha competividad con Busquets, De Jong, Pedri, Gavi y Pjanic. En ataque, la revolución la encabeza Robert Lewandowski (45 millones más 5 en variables), que se posiciona como inamovible en el once de Xavi. Raphinha (58 millones más otros siete) es la gran apuesta para los extremos junto a la ampliación de contrato de Ousmane Dembélé. Ansu FAti, Ferran Torres y Memphis completan la delantera.