¿Puede jugar el Mirandés en Primera División? Los requisitos y las obras en caso de ascenso

Lo cierto es que, en caso de imponerse a los carbayones y ascender, el Mirandés no sería la entidad que represente a la localidad con menos habitantes de la historia en la élite, al tener ese honor el Eibar. Pero, de todos modos, no restaría un ápice de mérito a lo logrado por los jabatos, un conjunto con una forma de gestionar sus recursos de una manera un tanto peculiar.

El equipo de Miranda de Ebro (según datos del INE en 2024, cuenta con 36.025 habitantes) ni siquiera tiene la mitad de su plantilla con futbolistas en propiedad, sino que se ha nutrido sistemáticamente durante las últimas campañas de muchos cedidos de clubes de Primera División. Su cercanía con el País Vasco le ha permitido ganarse la confianza del Athletic Club, Real Sociedad y Deportivo Alavés para que estos decidan foguear a sus jugadores en el Mirandés.

Todo ello con una estructura de lo más modesta del fútbol profesional español. De hecho, Anduva es el recinto con menor aforo de las dos primeras categorías, incluso, superado por el Nuevo Pepico Amat, campo del Eldense, equipo que ha bajado a Primera Federación. Eibar y Huesca no se quedan tampoco muy lejos, pero también superan la capacidad del feudo jabato, que tiene cabida para 5.759 espectadores, cifra que recoge el club en su página web, si bien para esta temporada hubo una ligera reducción de unos 100 asientos. Precisamente, todo lo relacionado con el estadio es lo que genera mayor debate en torno a si el Mirandés podría participar en Primera en caso de ganarse el ascenso en el campo.

A pesar del escaso aforo o de otras situaciones visibles desde la televisión, como un tiro de cámara notablemente bajo en relación a otros escenarios, lo cierto es que no hay ningún impedimento para que el Mirandés consume el ascenso a Primera División.

El Mirandés, como todos los equipos que participan en las competiciones organizadas por LaLiga, ha de someterse el reglamento marcado por la patronal. Pero, aun así, desde LaLiga existe una cierta flexibilidad en diferentes cuestiones, siempre y cuando, claro, se cumplan unos mínimos. Por ejemplo, en el Reglamento General de LaLiga, en su Sección II, Artículo XIII.10., se fija que «los estadios deberán contar con un aforo mínimo de 8.000 localidades», si bien, se recoge también que «la Comisión Delegada podrá, por circunstancias de índole demográfica, arquitectónica, técnica o histórica del Club/SAD, aceptar la disminución de dicho aforo mínimo exigido».

Por lo tanto, la ampliación del aforo podría responder más a una cuestión de que el club quiera contar con mayor capacidad para generar mayor volumen de ingresos por venta de entradas que a una imposición de LaLiga.

Aun así, el Mirandés, ascienda o no, ya ha anunciado que no comenzará la próxima temporada actuando en condición de local en Anduva. Lo hará en Mendizorroza, casa del Alavés, al haber llegado a un acuerdo ambas entidades. Se podría llegar a dar la circunstancia, de hecho, de que el Mirandés reciba al Alavés en las primeras jornadas... en casa del Alavés. En ese caso, por lo tanto, el duelo de la segunda vuelta entre ambos se celebraría también en el mismo recinto.

El Mirandés se mudará provisionalmente a inicios de la temporada 2025-26, independientemente de la categoría en la que milite, por la construcción de la nueva Tribuna Principal, aquella que está situada encima de los banquillos y donde se ubican los palcos o la zona de prensa. El nuevo graderío, una vez acabado, dejaría el campo apto para la disputa de partidos de Primera División, también teniendo en cuenta que en LaLiga EA Sports se usa una tecnología, la del fuera de juego semiautomático, que aún no ha llegado a Segunda. Las obras comenzarán tras la disputa de la ida contra el Real Oviedo, el que será el último partido del Mirandés esta campaña en Anduva.