Prueba de fuego para Vilda

La Federación ha controlado aparentemente el incendio, posicionándose con firmeza al lado de Vilda, confirmándole en el cargo y conminando a las jugadoras sublevadas a retractarse. «Únicamente regresarán si asumen su error y piden perdón», expuso el organismo presidido por Luis Rubiales en un comunicado. No obstante, el seleccionador sigue estando bajo la lupa después del testimonio de varias exinternacionales en el que criticaban el talante controlador del técnico durante las concentraciones.

En las botas del once que presente el seleccionador está noche reside el futuro del debate. «Mientras haya jugadoras que quieran vestir la camiseta de la selección, habrá selección. En el mundo del fútbol sería nocivo que, sin haber motivos extradeportivos, se tomara una decisión contra un entrenador», aseguraba Luis Rubiales esta semana en 'Marca', aunque los resultados en el mundo del fútbol son los que realmente mandan. Tras conseguir brillantemente la clasificación para el Mundial de Australia y Nueva Zelanda de 2023, la selección afronta dos duelos amistosos de preparación en esta ventana: Suecia esta noche y Estados Unidos el próximo martes. Dos de los rivales más temibles del actual panorama mundial y que llegan en el momento más convulso e inoportuno para España.

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Suecia ocupa el tercer puesto en el ranking FIFA (Estados Unidos es la primera) y es un rival al que España no ha ganado jamás. La selección de Vilda, cuyo crecimiento estos últimos años le ha permitido encaramarse a la octava posición, no podrá contar con la mejor jugadora del mundo, Alexia Putellas, ni con el grueso de las jugadoras del Barcelona, base de España y de los éxitos europeos cosechados por el club catalán. Un hándicap para medirse a un combinado que cuenta con jugadoras de muchísimo nivel, como Fridolina Rölfo, delantera del Barcelona, y Lindahl (exguardameta del Atlético de Madrid). Dos derrotas contundentes ante Suecia y Estados Unidos podrían avivar el fuego y las críticas contra Vilda. Unas actuaciones dignas, teniendo en cuenta las circunstancias en las que se afrontan, darían oxígeno al seleccionador.

«Hay jugadoras que quieren representar a su selección, pero ahora han optado por hacer huelga y no participar. Las apoyo al cien por ciento. Y si hubiera estado en su situación, habría hecho lo mismo. Excluir a estas jugadoras y traer a otras no es la solución para crear el mejor equipo», se posicionó Rölfo en el medio sueco 'Fotbollskanalen'.

Esther González, nueva capitana de la selección, vislumbraba ayer una nueva era: «El partido es una buena prueba para saber de dónde empezamos», apuntaba la delantera del Real Madrid. Vilda, por su parte, era consciente de la dificultad que se le avecina: «Espero que salgamos reforzadas, es uno de los mejores equipos del mundo. Estoy encantado con el equipo que tengo y en las miradas de ilusión que veo».