«Quería hacer este vídeo después de todo lo que está pasando y pedir perdón a mis compañeros y al club. Sinceramente, pensaba que tendríamos libre después del partido como venía pasando durante las semanas anteriores. Tenía organizado este viaje a Arabia, el cual había cancelado anteriormente, pero este no pude. Vuelvo a reiterar mis disculpas por lo que hice y estoy a la espera de lo que el club decida», se explica el futbolista en un vídeo en el que aparece muy serio.
Equivocado o no, el caso estalló el lunes, tras la derrota del PSG contra el Lorient (1-3), cuando el argentino se desplazó hasta Arabia Saudí sin permiso para participar en una serie de actos que respondían a su acuerdo de patrocinio con la Oficina de Turismo de dicho país. por este motivo se ausentó del entrenamiento sin que el cuerpo técnico ni la dirección deportiva del PSG tuvieran conocimiento del viaje.
Ello provocó que en los despachos del club parisino se decidiese imponer al argentino un castigo, suspendiéndolo de empleo y sueldo durante dos semanas. Mientras, entre los aficionados radicales parisinos se extendió un enfado que llevó incluso a colocarlos ante la sede del club para lanzar duros cánticos en contra del campeón del mundo.
A raíz de eso se comenzó a hablar de posibles nuevos destinos para Messi a partir del verano, desde un posible regreso al Fútbol Club Barcelona, a la posibilidad por mudarse a la liga de Arabia Saudí, desde donde habría recibido una mareante oferta económica.
Ahora estas palabras podrían significar que la ruptura entre las partes no es tal y que no está tan claro que el futuro de Messi esté lejos del Parque de los Príncipes la próxima temporada.
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