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Desde mis Antípodas

Tápese un poquito, señor Rubiales

Lo que ocurrió en la celebración del Mundial es injustificable. Un cargo público, y él lo es, requiere contención, inteligencia emocional, saber estar y diplomacia

Jaque mate a la historia

Luis Rubiales, en la previa de la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda REUTERS
María José Hostalrich

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Lo que nos faltaba. Por si había pocas fechorías en el haber de Luis Rubiales, el domingo siguió aumentando su cuenta con lo que podríamos catalogar, siendo generosos, como un acto impropio, deleznable, vergonzante, sin renunciar de plano a considerarlo como vomitivo.

Bonito papel, el ... día que España gana su segundo Mundial en la Historia. El máximo representante de nuestro fútbol copando las páginas de los principales diarios internacionales, en lo que para muchos supone una clara muestra de que el sexismo sigue vigente en este deporte. No, no somos tontos, ni gilipollas por molestarnos y, mucho menos, por alzar la voz. El mundo no está contra él, ni nos creemos sus disculpas, con precipitación, ante la presión social desatada.

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