Las dos versiones de Montse Tomé

Montse Tomé sí exculpó a Vilda de la no convocatoria de Jenni en su primera lista como seleccionadora. Sólo faltaba que la relación la hubiera confeccionado la persona a la que de traicionó. Menos creíble fue que dijera que no la llamó por razones estrictamente deportivas. O mintió ahora o mintió entonces, cuando afirmó que lo hizo para protegerla («¿para protegerme de qué exactamente?», replicó la propia jugadora).

Lo que seguimos sin saber es si en la confección de esa primera lista tuvieron algo que ver los responsables federativos del fútbol femenino, Rafa del Amo y Ana Álvarez. En aquella convocatoria algo llamó poderosamente la atención entre los seguidores y profesionales del fútbol femenino: la vuelta de otras dos jugadoras de las 15 amotinadas, Laia Aleixandri y, sobre todo, Lucía García. Si alguien apoyó el nombramiento de Montse como seleccionadora fue la federación asturiana, donde Lucía García es todo un referente, una institución. Pasó de olvidada a titularísima.

Pero bueno, las dudas alrededor de Montse Tomé están más orientadas hacia lo que viene. Queda menos de un mes para la fase final de la Nations Cup, competición que además dictaminará si España va a los Juegos Olímpicos de París. ¿Se atreverá la seleccionadora a dejar a Alexia Putellas fuera de la lista para la cita por motivos deportivos? La jugadora viene de una importante lesión y no tiene ni el ritmo ni los partidos de las compañeras. Veremos.