Kike García: «Cada vez hay menos contacto en el fútbol»

—Es de un pueblo de Cuenca, pero ¿cuántas veces le han dicho que parece de Guipúzcoa?

—¡Muchas veces! He estado mucho tiempo en el Eibar, viviendo en Munguía, y al final mucha gente que conoces te dice: «Kike, pasas por el jugador vasco, peleón, aguerrido».

—Se define como un tipo humilde, sencillo... en el fútbol cada vez hay menos así.

—Habrá de todo. La gente nos tiene a los futbolistas como que somos unos agrandados, pero luego hay futbolistas que hemos salido de pueblos, que no cambiamos. Mis padres me educaron de una manera y no he cambiado.

—¿Falta humildad en el mundo del fútbol?

—Sí, puede ser. Al final falta humildad porque movemos tantas cosas, genera tanto, que puedes perder la noción de lo que es la vida. Pero yo creo que los futbolistas cada vez somos más ejemplo, porque muchos niños quieren ser como nosotros y creo que estamos más en la realidad de la vida.

—¿En el fútbol actual hay más obreros o más estrellitas?

—Salvo los cuatro o cinco primeros, los equipos top, creo que los demás somos jugadores que tenemos que trabajar, que currar... Para mantenerte en la élite todos somos currantes.

—Marcó en el Bernabéu y se le saturaron las redes sociales. ¿Se nota mucho la diferencia de repercusión?

—Sí claro, al final lo que generan el Real Madrid o el Barcelona no lo generan otros. La repercusión que da toda la gente que ve esos partidos... pero muchas veces meter gol a esos equipos no sirve de mucho. En este caso sí sirvió para sacar un punto, pero muchas veces es mejor metérselo a equipos de nuestra zona porque tenemos más posibilidades de sumar.

—¿A veces en el fútbol mediáticamente parece que sólo existen Real Madrid y Barcelona?

—Por supuesto. Tú ves la prensa, que al final soy futbolero y te gusta verlo, y parece que sólo existen Real Madrid, Barcelona, Atlético... Es normal, la grandeza de esos equipos, lo que mueven... Pero aquí en Pamplona es súper bonito porque en Navarra todos son de Osasuna, todos los niños con la camiseta, y es súper importante que sean del equipo de la ciudad en la que viven, de la que son.

—Con la gran temporada que lleva Osasuna... ¿Sienten que les deberían conceder más protagonismo?

—Sí, la verdad es que no nos están dando la importancia que tenemos. Estamos en una posición privilegiada en Liga, en semifinales de Copa con una ventaja, hicimos un buen partido, y poco se habla de Osasuna. Tenemos cuatro internacionales, dos Sub21, David García y Abde, y no es que se hable mucho de nosotros. Pero estamos acostumbrados, nosotros callados, trabajando e intentando dar alegrías a nuestra gente.

—David García, a la selección, Joselu con su edad y también. Luis de la Fuente está dando oportunidades a otros perfiles.

—Bueno... No pienso en eso, me queda muy lejano. No soy ni titular en Osasuna, estoy jugando poco y para jugar ahí tienes que marcar diferencias, como está haciendo Joselu en el Espanyol, que para mí es muy merecido. Yo trabajo para conseguir minutos, meter goles y ayudar al equipo. Y en lo colectivo contentos con David García porque se lo merece, está siendo de lo mejor.

—¿Está David García para un grande?

—Eso lo marca en cada partido que juega, está marcando diferencias. Va a tener muchas novias y tendrá que decidir si quedarse en su casa o marchar y crecer como han hecho muchos jugadores de Osasuna.

—Usted cumple 34 años en noviembre. ¿Qué hace ahora para cuidarse que no hacía con 25?

—Sigo haciendo exactamente lo mismo que con 25. Yo disfruto mucho con lo que hago, con mi profesión, me gusta cuidarme, comer bien, estar en mi peso. Hago el trabajo de aquí que me manda el preparador y tengo gente que me ayuda fuera. Y estoy tranquilo en este sentido, físicamente me encuentro muy bien. Lo que importa es que lo futbolístico salga bien.

—Usted jugó año y medio en el Middlebrough. ¿Qué tal el inglés?

—Bueno, fui allí con muchos españoles, el cuerpo técnico con Aitor Karanka e Iván Pérez, y hablábamos mucho en español. Pero me defendía. Con las clases, hablar de fútbol te entienden bien. Otra cosa era salir al supermercado y pedir algo. Eso costaba más.

—Allí los árbitros son más permisivos. En la Liga ya van 103 expulsiones y en la Premier sólo 25. ¿Cómo lo ve?

—Lo que veo es que cada vez hay menos contacto en el fútbol. Las cosas que son fútbol, te dejas caer y falta, o VAR y falta... El fútbol es contacto, tiene que haber duelos, hay que ir fuerte... y ahora a la mínima es falta. Hay que darle más naturalidad al juego y muchas veces dejar seguir porque el fútbol ahora cada vez es más parado.

—A un futbolista como usted esto no le hará mucha gracia.

—Los que somos grandes y corpulentos, al final te acostumbras. Pero no es por nosotros, es por todo el fútbol, por darle más dinamismo y que sea fútbol, que no por tocarte un poco sea falta. Por eso cuando nos pita Mateu, que le critican mucho, para mí es un gran árbitro, que no se deja influir por nada, que no para por pequeños roces, y a mí me gusta.

—Y para Kike García, que se adapta a la perfección al fútbol del norte ¿qué mejor escenario que un Athletic-Osasuna de Copa?

—Bueno, bueno. Va a ser un partido bonito, mucho de duelos, frenético, con un ritmo altísimo. Esperemos estar a la altura, sacar un buen resultado y estar en la final.

—Vamos a soñar: minuto 90 en San Mamés, gana el Athletic 1-0... balón colgado al área y gol de cabeza de Kike García... ¿Qué haría?

—Sí, lo sueño, lo sueño. Sería muy bonito. El día más bonito de mi vida en el fútbol. Pero hay que ser realista, está bien pensarlo, pero hay que salir fuertes, y ojalá que yo o cualquier compañero lo marque y estemos en la final.

—No va a ser fácil, el Athletic lleva cuatro años entre semifinales y finales de Copa...

—Ellos son conscientes de que si quieren llegar a un título la opción es la Copa del Rey y basarán todo en este partido, se la juegan mucho, con su gente. Esperemos competirlos, sabemos que tendremos rachas de sufrir mucho y ojalá estemos acertados tanto atrás como arriba.

—Osasuna sólo ha llegado a una final en toda su historia. ¿Qué significaría llegar a esta final?

—Estar en la primera línea a nivel nacional y europeo, porque una final de Copa la ve todo el mundo. Un equipo que está creciendo, que desde que ascendió se está reforzando con gente contrastada, de mucha calidad, como los casos de Moi, Rubén Peña, Aitor. Sería muy bonito para todos, un sueño, porque si sólo se ha llegado una vez en toda la historia habla de la dificultad de llegar.

—En Pamplona se siente la pasión por el fútbol. ¿Cómo está el ambiente? ¿Qué le dicen por la calle?

—Son muy pasionales y te dicen que hay que sacar adelante el partido como sea, que hay que pasar a esa final, también por la rivalidad que tienes con el Athletic. Te meten en el partido mucho antes y esperemos estar a la altura y darles esa alegría.

—En Copa había sido titular en todos los partidos, menos en la ida con el Athletic. ¿Qué pálpito tiene para la vuelta?

—Es verdad que había jugado toda la Copa, me esperaba jugar también la ida, pero el entrenador se decidió por otro, ya lo vi venir jugando en el Pizjuán. Yo estoy preparado para todo, quiero jugar, no sólo este partido, quiero jugar todo y ayudar en el campo.

—El viernes en Mallorca sólo jugó unos minutos...

—Por sensaciones, conociendo al míster que rota mucho... Pero aunque no hayas jugado el viernes nadie te dice que vayas a jugar el martes.

—En Liga está teniendo menos oportunidades. Sólo cinco partidos como titular, pero eso sí, ha participado en las 26 jornadas

—Sí, en ese aspecto estoy contento, el míster me está dando la oportunidad, he tenido la suerte de no caer en ninguna lesión y estar siempre disponible. Trato de darlo todo en todos los entrenamientos y cuando salgo, aunque sean 10 ó 15 minutos, salgo con todo, a muerte, aunque a veces cueste meterse en el ritmo del partido, que es alto, pero estoy acostumbrado.

—Al equipo le cuesta hacer goles. Sólo 22 en Liga, el cuarto equipo que menos goles marca.

—Nos está costando meter goles. Es un tema colectivo, que igual que defendemos todos a una, tenemos que empujar todos también para generar más ocasiones. Quizá hay que sacar más centros por las características de nuestros delanteros, dar mejor el último pase... porque llegar una vez y meter un gol es muy complicado.

—Por último, le quiero preguntar por Mendilibar, usted lo conoce bien. ¿Salvará al Sevilla?

—Sí, es un pedazo de entrenador. Me alegro mucho de que le haya llegado la oportunidad del Sevilla. Si los jugadores están con él, con su idea, van a disfrutar mucho, con el día a día y jugando, porque es de apretar, de segunda jugada, de sacar centros, de líneas adelantadas. Es un tío sensacional y ojalá que pueda salirle todo en estos tres meses y estar mucho más tiempo en Sevilla.

—Hay quien sólo le ve allí hasta junio...

—Eso lo marcarán los resultados, que haga una buena Europa League, y luego están las opiniones, que seguro que preguntarán a los jugadores, que la afición esté contenta. Seguro que lo va a hacer tan bien que va a seguir ahí.