Los de Galtier cedieron en el primer asalto de la eliminatoria ante un conjunto alemán muy motivado y pese a que contaban los locales con todas sus estrellas sobre el campo, incluido el central sevillano.
Tras el pitido final con el que los de Nagelsmann se marchaban de vuelta a Múnich con la ventaja debajo del brazo, los jugadores del PSG tuvieron un amable gesto con sus aficionados y se acercaron a uno de los fondos para agradecerles con aplausos el apoyo.
Fue entonces cuando se produjo la imagen de Ramos que ha dado la vuelta al mundo. En un momento dado, el defensa, rodeado de fotógrafos, empuja levemente a uno de ellos, recriminándole que se estuviera metiendo entre los jugadores.
Acto seguido, al darse la vuelta, le propina otro empujón, esta vez con mucha más fuerza, a otro fotoperiodista que trataba de sacar la foto perfecta del emotivo momento, el del perdón a los fieles hinchas. Un trabajador del PSG se vio obligado a intervenir y calmar los ánimos.
El gesto ha hecho a Ramos receptor de todo tipo de críticas a través de las redes sociales, afeando la conducta del futbolista ante dos personas que sólo hacían su trabajo. Él, por su parte, no se ha pronunciado al respecto.
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