Los arbitrajes de la Eurocopa, mejor que en la Champions

A su juicio, las jugadas polémicas que han aparecido durante el torneo se han corregido enseguida gracias a la intervención del VAR o se han minimizado al máximo. Los datos aportados por Rosetti indican que hubo 20 correcciones en 36 partidos, un índice en su consideración no muy alto, y de las que solo ocho precisaron de una confirmación del árbitro principal sobre el césped: dos goles anulados, otro asignado y cinco penaltis concedidos.

El tiempo total de las revisiones tuvo una media de un minuto y 36 segundos, mientras que el del chequeo de los árbitros ante la pantalla se redujo a 51 segundos. Según Rosetti, es menos que en la Champions, donde la media de uno y otro concepto está en un minuto y 39 segundos para el total y en 56 segundos para la acción del árbitro en el césped.

Por otro lado, Rosetti detalló que ha habido 808 faltas, es decir, casi las mismas que en la pasada edición disputada en 2021 (808). Hizo hincapié en el incremento de tarjetas amarillas y rojas: en la actual Eurocopa se han mostrado 106 amarillas y tres rojas, por las 98 y dos de 2020, respectivamente. El tiempo disputado de juego real de media en los partidos es 59′10 minutos, 40 segundos menos que en el certamen interior, mientras que se produjeron 329 sustituciones por las 307 de hace cuatro años.

Rosetti confirmó con hechos, nunca con palabras, también la mala consideración de los jueces españoles. Ni el extremeño Jesús Gil Manzano dirigirá más partidos de la Eurocopa, ni el canario Hernández Hernández estará más veces al frente de la sala VAR.

Gil Manzano y sus dos asistentes fueron protagonistas de una acción polémica y desacertada en el Austria-Francia de la primera jornada. A los 35 minutos, indicaron un saque de puerta a favor de los galos que claramente debió terminar en córner. Y tras el saque del portero Maignan se produjo la jugada que terminó con el tanto de la victoria de Francia, anotado por Wöber en propia puerta.

A Hernández Hernández se le acusa de no haber llamado desde el VAR al argentino Facundo Tello para que revisara un posible penalti del húngaro Orbán sobre el escocés Armstrong que indignó a la Tartan Army, ya que acabó cayendo por la mínima. Nuevo varapalo para el arbitraje español, que solo se queda con Juan Martínez Munuera en el VAR.