Era tan bueno como Iniesta, y ha acabado detenido en una operación antidroga

El Racing se proclamó campeón tras vencer en la final al Espanyol, e Iniesta fue declarado el mejor jugador del torneo. Fue un galardón individual no exento de cierta polémica, precisamente porque muchos consideraban que debería haberlo ganado Valle, estrella del equipo que se alzó con el título.

Ambos chavales fueron cubriendo etapas hasta convertirse en futbolistas profesionales, pero sus botas recorrieron caminos bien distintos. Casi contrapuestos. Así, transcurridos 28 años y después de que ambos se hayan retirado, mientras que Iniesta presenta una hoja de servicios inmaculada y deslumbrante que le han convertido en un referente del fútbol español y mundial, Valle fue detenido la semana pasada por la policía en una operación contra el tráfico de drogas.

Según publica este viernes 'El Diario Montañés', «la Policía Nacional ha detenido al exjugador del Racing Jonatan Valle como presunto autor de un delito de tráfico de drogas en el marco de la operación 'Fire', que ha dejado otros diez arrestados en Cantabria».

«Los agentes registraron la pasada semana la casa del exfutbolista en Mortera, donde encontraron numerosos utensilios como balanzas de precisión y otros enseres que se utilizan para preparar dosis de cocaína listas para la venta, papelinas, también diferentes cantidades de esa droga y dinero en efectivo. La que fuera gran promesa de la cantera verdiblanca, que tiene ahora 39 años, se encuentra en libertad provisional con cargos a la espera de ser procesado», añade el periódico cántabro.

«Las investigaciones identificaron primero una rama de distribución radicada en Santander, promovida por un individuo que distribuía cocaína al menudeo a pequeña escala. Servía a los clientes en el domicilio y también en diferentes puntos de la ciudad, siempre escondido en el taxi en el que trabajaba; pero no estaba solo. Tenía un estrecho colaborador en la distribución de esta sustancia estupefaciente y otros dos proveedores que le surtían de la droga que después distribuía...».

«El 20 de noviembre la investigación concluyó con la entrada y registro de siete inmuebles, y la detención de diez de los once implicados en Santander y en otros municipios de Cantabria, entre ellos Jonatan Valle... Durante los registros los agentes incautaron 3.500 dosis de cocaína, con un peso total de dos kilogramos... También hallaron 260 gramos de hachís, seis gramos de MDMA (éxtasis), diez balanzas de precisión, cuatro envasadoras al vacío y diversas bolsas con recortes circulares... En los registros llevados a cabo también se intervino un vehículo, 26.800 euros, un arma de fuego, catorce armas blancas, catorce teléfonos móviles y dieciocho relojes. Los once detenidos, de los cuales siete de ellos contaban con antecedentes, fueron puestos a disposición judicial, que decidió el ingreso en prisión de dos hombres. Para conocer el valor monetario de lo incautado, las 3.500 papelinas alcanzarían un valor en el mercado ilícito de unos 250.000 euros».

La detención de Valle es el último capítulo de una lista de noticias que describen la difícil trayectoria vital del exfutbolista santanderino. Su enorme calidad se ha visto lastrada por una personalidad descuidada y problemática.

En 2003, año de su debut en Primera vistiendo la camiseta del Racing, ya vivió el primer follón al verse implicado en una pelea nocturna en un bar. A partir de ahí acumuló multas de tráfico, retirada de carnet de conducir, positivo en control de alcoholemia y algún otro escándalo con aficionados y compañeros de equipo.

Esa propensión a los líos le ha llevado a cambiar de equipo y de categoría futbolística con frecuencia. Tras abandonar su ciudad natal, militó en los siguientes clubes: Málaga, Ponferradina, Castellón, Leganés, Rubin Kazán (Rusia), Recreativo, Lugo y Burgos.