El Barça de «súper Yamal» extravía su billete a la final ante un épico «Interminator» que tuvo «bula arbitral»

El guión, casi de película de Hollywood, encontró su lógico eco en las páginas y webs de muchos medios, que en general hablan de la locura que se vivió en el Giuseppe Meazza, del insuficiente buen hacer del Barça y de la resiliencia épica del Inter de Milán, a la postre finalista de la Champions.

En la prensa deportiva española los dos principales diarios especializados casi coinciden este miércoles en sus portadas. Así, mientras 'Marca' señala que al equipo de Hansi Flick le sobró un minuto para amarrar el pase a la final, el 'As' considera que fueron dos. En ambos casos apuntan a la clave de que los azulgranas no supieran jugar de otra forma los últimos instantes del tiempo reglamentario para evitar el empate del Inter que mandó el choque a la prórroga.

En torno a esa idea el primero de estos diarios destaca la amargura de la derrota y el fin que supuso al sueño del triplete, mientras que el segundo sentencia que «mereció pasar» y pone el foco en las quejas del entrenador azulgrana respecto a la labor arbitral.

Justo en esas dos ideas se centra y profundiza la prensa deportiva catalana, que elogia el fútbol del conjunto culé, remarca que fue muy superior al del Inter, y considera que el Barça puede irse de la Champions «con la cabeza muy alta». En esta línea el 'Sport' titula en su portada «¡Qué orgullo de equipo!», mientras que 'El Mundo Deportivo' se refiere a un «Adiós épico», con un «partido soberbio liderado por un Lamine estratosférico», y ante «un Inter con bula arbitral».

Fuera de España, los periódicos italianos, como no podía ser de otra forma, ponen el foco en la hazaña del Inter, capaz de batir al Barça de «súper Yamal». La rosada portada de 'La Gazzetta dello Sport' se tiñe hoy con los colores 'neroazzurri' y un titular «Mítico Inter», protagonista de una «fantástica victoria». El popular diario italiano lleva a sus páginas las palabras de Frattesi, autor del gol del triunfo interista, que confesó que tras su tanto «gritó y dejó de ver» por la emoción.

Por su parte 'Tuttosport' señala que este es «el año del Inter», al que bautiza, haciendo un juego de palabras con una conocida película de Arnold Schwarzenegger: «Interminator».

En Francia, 'L'Equipe' apenas da sitio en su portada a lo sucedido en el norte de Italia, más centrado en el choque del París Saint-Germain contra el Arsenal que otorgará el segundo billete a la final. Sin embargo en su web el prestigioso diario galo titula sobre el duelo entre 'neroazzurri' y blaugranas «Fa-bu-leux» (Fa-bu-loso).

Algo parecido ocurre con la prensa inglesa, que si bien en sus ediciones impresas dedica toda la tinta al Arsenal y sus opciones de estar en la final de Múnich, en sus webs dedica grandes elogios al fútbol visto en el estadio del Inter. Por ejemplo el 'Mirror' escribe que «los gigantes italianos sobreviven al Barcelona en una de las eliminatorias de Champions más grandes de la historia».

El 'Mail' por su parte, además de calificar el choque de «clásico para la historia», señala que los italianos «sellaron un billete a la cita final después de que los catalanes pensasen que había logrado una remontada memorable».

«Frattesi sella un partido loco para coronar una de las mejores eliminatorias de Champions de siempre», escribe el 'Sun' en Internet.

En Alemania, que acogerá la final aunque ya no tenga ningún equipo en la competición, los análisis se centraron en la figura de su compatriota Hansi Flick, entrenador del Barça.

El diario 'Bild' recogió el visible enfado del técnico tras la derrota y la eliminación y las palabras que le dedicó al árbitro, Szymon Marciniak: «No quiero hablar demasiado del árbitro, pero todas las decisiones que tomó fueron a su favor».

Finalmente destaca, por curioso, el titular con el que el portugués 'A Bola' se refirió al Inter-Barça desde que el colegiado pitó su final: «¡Gracias por este partido memorable!». Mientras, sus vecinos del 'Record' lo califican de «épico» e incluso de «himno al fútbol» en su web, y titulan «Otra noche de locos» en su edición de papel.