En una jornada aparatosa como hacía tiempo que no se veía en el fútbol español, tras el golpe contra una cámara de Porras Ayuso y la conmoción de Budimir, el árbitro del Real Madrid - Sevilla, Isidro Díaz de Mera, se sumó a las ... lista de incidencias.
El colegiado del comité castellano-manchego, aproximadamente en el minuto 60 y con 0-0 en el marcador, detuvo el partido y se dirigió a la zona técnica. Allí hizo gestos a los equipos médicos de que sentía algún tipo de molestias en su gemelo derecho. Tras una rápida evaluación y varios minutos de incertidumbre, decidió que no podía seguir.
Jannick Buyla, que militaba entonces en el conjunto extremeño, se negaba a declarar ante la juez que investiga el caso
Como marca el protocolo, fue el cuarto colegiado, Carlos Fernández Buergo, de 29 años y acostumbrado a pitar en la Primera RFEF (antigua Segunda división B), quien le sustituyó.
El asturiano tuvo que colocarse con rapidez el micrófono y los demás artilugios necesarios y, por sorpresa, hizo su debut en Primera ante todo un Santiago Bernabéu, que se tomó con un humor la situación. «Que salga Negreira» fue uno de los cánticos escuchados en el feudo blanco.
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