Admitida la querella contra el árbitro Eder Mallo Fernández por presuntos delitos de falsedad documental y corrupción en el deporte

Como ya informó ABC a principios de diciembre, el Nástic es el primer club de fútbol que ha presentado una querella criminal contra un árbitro, en concreto contra Eder Mallo Fernández, que dirigió el pasado 22 de junio la vuelta de la final de la promoción de ascenso ante el Málaga, en la que el conjunto andaluz, con un jugador más por expulsión de un rival, acabó subiendo de categoría con un gol en el minuto 124.

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El Nàstic presenta la primera querella contra un árbitro tras la investigación de una agencia de detectives

Miguel Zarza

Considera el club de Tarragona que el colegiado le perjudicó de forma premeditada en la final del ascenso a Segunda contra el Málaga y mintió en la redacción del acta del encuentro

El club tarraconense decidió acudir a la vía penal después de que una investigación de la agencia de detectives Método 3 concluyera que el citado colegiado actuó de «forma premeditada» para perjudicar al Nàstic.

El auto dictado por el Juzgado de Instrucción Número 4 de Tarragona, que ha sido notificado este lunes, manifiesta que «los hechos relatados en el escrito de querella poseen entidad suficiente como para ser constitutivos, al menos indiciariamente, de un delito de falsedad documental del art. 390.1.1 CP y un delito de corrupción en el deporte del art. 286 bis.4 CP.».

En el auto del citado juzgado se señala que de la querella presentada se desprenden indicios de la comisión de los dos delitos que señala el Nàstic: falsedad documental y otro de corrupción en el deporte.

El Nástic considera que el colegiado incurrió en dicha falsedad documental después de que varios testigos e incluso unos audios contradijesen lo redactado por Mallo Fernández en el acta del partido. El árbitro señaló que había recibido amenazas de muerte y había «temido por su integridad física» ante el acoso de directivos del club catalán en el acceso a su vestuario, un extremo que incluso en aquellos momentos negaron los agentes de la autoridad presentes en el partido.

Los audios corresponden a una conversación entre un detective y el colegiado, de la que el club entiende que se desprende que el colegiado en ningún momento tuvo miedo de que alguien entrase en su vestuario. «Yo les dije a estos que como entren nos tenemos que pegar, si no quedaremos aquí como tontos, y dijo, no, aquí no entra nadie», rememoraba el árbitro sobre la situación tras el partido, señalándola como un momento «que no es agradable, pero ya está».

El Nástic añade que, después de recibir esta notificación, continuará defendiendo la dignidad y honorabilidad de la entidad y de Tarragona.